Traducción:
Parte 1: Pretinaverse
Parte 2: Robert
Corrección y edición:
Pretinaverse
Carlos
※ ※ ※ ※ ※
『 ????: Ooh, Ken-san, que raro es verte paseando por aquí a estas horas de la mañana. ¿Será que por fin te despidieron? 』
『 Kenichi: No me vengas con esa mierda. Ese lugar no funcionaría ni la mitad de bien sin mí. Es sólo que no querían verme trabajando tan duro quitándoles todo el trabajo que hacer, por lo que me dejaron descansar un tiempo para que mis compañeros se motivaran un poco. 』
A pesar de que el dueño de la panadería local, que paseaba en bicicleta, había hecho ese comentario en forma de un amigable saludo, Kenichi le terminó mostrando el dedo del medio, soltándole improperios. Continuaron por un rato con aquella ruidosa conversación, hasta que, finalmente, dijeron adiós.
『 Kenichi: Joder… Todo el mundo, cuando ve a alguien con el día libre, comienza con todo eso de «te despidieron, te despidieron». Tengo una adorable familia que alimentar, por lo que no podría dejar que algo tan incompetente como eso me ocurriera. E incluso si hiciera algo que pudiera provocar mi despido, tampoco es como si fuera a dejar que me descubrieran, jejeje. 』
『 Subaru: … Como una de las personas a las que alimentas, espero sinceramente que, en vez de ser bueno ocultando tus desastres, no vayas por ahí haciendo cosas que pudieran hacer que te despidan. 』
Con ambas manos metidas en los bolsillos de su chándal, Subaru, que había estado esperando a un lado del camino a que aquella conversación terminara, se encogió de hombros. Viendo a su hijo parado entre las sombras, que parecía a punto de salir volando por el viento, Kenichi agitó ambas manos diciendo 『 Ey ey 』, mientras sacudía la cabeza,
『 Kenichi: Si pierdes tu espíritu de aventura, no madurarás como hombre ni como persona, ¿sabes? Hacer cosas malas es otra historia, pero vivir al límite es divertido, es decir… 』
『 Subaru: Ya estás bastante viejo como para andar diciendo tonteras como esas. Deberías sentar la cabeza. Tienes más de 40 años, por lo que no deberías andar diciendo esas cosas poco prácticas como un niño pequeño. 』
『 Kenichi: Creo firmemente que los hombres, aunque crezcan, tienen un lado infantil en alguna parte de su interior. Además, eres tú quien está en la edad de decir ese tipo de tonteras, pero no eres de los que participan en las conversaciones; por lo que a papá no le queda otra que decirlas por ti. ¿Qué hay de malo en eso? 』
『 Subaru: No hay nada de malo en eso, pero tampoco es como si yo pudiera simplemente hablarle a un anciano cualquiera que no conozco. 』
『 Kenichi: Él no era un desconocido; siempre le compro el pan cuando regreso a casa. Además, iba al mismo colegio que yo en secundaria, aunque se encontraba un curso más bajo que el mío. 』
Pero Subaru no iba a conocerle mejor con sólo decirle eso.
Tampoco se había preocupado jamás de ver el envoltorio del pan como para saber dónde había sido comprado y, definitivamente, nunca había pasado personalmente por aquella panadería.
Y, mientras el silencio de Subaru daba la sensación de que aquella conversación estaba llegando a su final, Kenichi chasqueó la lengua diciendo 『 Qué remedio… 』,
『 Kenichi: En una soleada y refrescante mañana como ésta, con esa cara de pocos amigos que llevas, vas a espantar al señor Sol-sama, ¿sabes? Tienes la expresión de un criminal siendo interrogado o algo por el estilo. 』
『 Subaru: Pues si tengo una expresión como esa, probablemente sea porque mi papá me sacó afuera por la fuerza, ¿no te parece? Dije que no quería; pero aun así, me obligaste. 』
『 Kenichi: Sólo parecía que no querías, pero tu cuerpo no aplicó ninguna resistencia. Todavía quieres a tu viejo padre, Subaru. Pero no te preocupes, que yo también te quiero. Aunque, claro, ¡tu mamá siempre estará en primer lugar! 』
Dando un pequeño salto, Kenichi se rio de buena gana, bruscamente palmoteando la espalda de Subaru. La fuerza con la que le daba, hizo a Subaru arquear las cejas y, de alguna manera, le dio la sensación de que había algo diferente en la animosa apariencia de Kenichi.
Bueno, su padre siempre había tenido esta clase de tensión brotando de su cuerpo, pero normalmente, el hiperanimoso Kenichi no le hubiese dado tantas vueltas a una conversación como la de ahora.
No sabía qué era, pero esta mañana su padre parecía especialmente tolerante.
—A diferencia de Subaru, que caminaba a su lado sintiendo como si su pecho estuviera siendo aplastado.
『 Subaru: Así que, mmm… 』
『 Kenichi: ¿Sí? 』
『 Subaru: Pues, que me trajiste aquí fuera porque querías decirme algo, ¿verdad? Normalmente no irías a tales extremos… así que, ¿qué ocurre? ¿O es algo de lo que no puedes hablar en casa? 』
Preguntándose si se trataría de algo que no quería que mamá oyera, Subaru preguntó aquello.
Pero fuera lo que fuera, Subaru tenía un vago mal presentimiento al respecto.
Después de todo, no sabía qué otra cosa podía ser, aparte de reprocharle su anémico estilo de vida.
Normalmente, Subaru haría oídos sordos ocultando la cabeza bajo la cobija del futón, pero no podía hacer eso fuera de casa.
——Siempre tengo la opción de ponerme a gritar como loco para hacerle callar… pero, si hago algo tan vergonzoso en la calle, probablemente él cambiaría su actitud hacia mí e incluso me—
Cuando pensó tal extremo, Subaru se sacudió la cabeza.
『 Subaru: Tratándose de mi padre, es posible que le divierta sentir esa vergüenza. Gh. 』
『 Kenichi: Aunque no tengo ni idea de lo que estás imaginando justo ahora, ¿qué hay con ese raro comentario? Que sepas que esto es sólo un día normal de conversación en familia bajo los rayos del sol, ¿sabes? 』
『 Subaru: ¿De verdad? Pues se me hace bastante difícil creerte. Pero confiaré en ti por ahora. 』
『 Kenichi: Confía en mí, confía en mí. Por cierto, Subaru, tú, uh… ¿preferirías un hermanito o una hermanita? 』
『 Subaru: ¡¡Que me preguntes eso ahora que tengo 17 años es aterrador, y sólo aterrador!! 』
Ese brusco cambio de tema hizo temblar a Subaru, que terminó por levantar la voz. Viendo cómo jadeaba Subaru, mientras sus hombros subían y bajaban, Kenichi mostró los dientes con una gran sonrisa 『 Era broma, era broma… 』,
『 Kenichi: A pesar de que tu mamá y yo todavía somos bastante cariñosos, sería un poco complicado intentar hacer otra personita a nuestra edad. Eso significa que, todo el amor de mamá y mío te pertenecen sólo a ti. ¿Feliz? 』
『 Subaru: Aah, sí, sí, feliz, feliz… Era sólo una broma, ¿cierto? 』
『 Kenichi: Ey ey, si me tientas de esa manera, me voy directo a casa a hacerte una hermanita. 』
Teniendo la sensación de que habían llegado a un punto en el que bromear ya no era suficiente, Subaru simplemente lo miró en silencio al final de aquel comentario. Y con una sonrisa forzosa de regreso, Kenichi entendió el significado.
—Subaru y su padre habían llegado a un camino pintoresco, a unos 10 minutos de su casa.
Era un sitio por donde pasaba un río que era bastante famoso por el lugar. A lo largo de la orilla, había muchos cerezos que, durante la primavera, se convertían en una de las principales atracciones del lugar. Pero, obviamente, aquella estación ya había terminado y, en lugar de unos rosados pétalos de cerezo, había un exquisito pasto verde cubriendo el suelo, iluminado bajo los brillantes rayos del sol.
Después del desayuno y antes de que terminara el horario de clases, Subaru, que todavía se encontraba atormentado por la culpa y la ansiedad, fue traído aquí por Kenichi.
Al principio, cuando salió de la casa, estaba preocupado de que lo estuviera engañando para llevarle a la escuela, pero,
『 Kenichi: ¿Sabes? Te ponías bastante receloso cada vez que girábamos en dirección a la escuela. Pero no es lo que crees. Simplemente tomamos el camino largo para llegar a la ribera del río. 』
Entendiendo a Subaru como si fuera un libro abierto, Kenichi arrastró furtivamente a Subaru hasta este lugar.
El viento arrastraba un dulce aroma de plantas y césped hacia la cima de aquella ribera. Y si uno se estiraba un poco, sería capaz de ver toda la extensión de aquel apacible río al otro lado de la cerca.
『 Kenichi: Esta cerca no estaba aquí en mis tiempos. Solía jugar siempre con mis amigos aquí en el río. Era muy divertido. Ah, sí; ¿recuerdas a Ikeda? Un día apareció un tifón de la nada y se nos ocurrió venir a ver lo genial que debía estar el río. Ese chico se lastimó al ser arrastrado por la corriente. En aquella ocasión, tuvo la suerte de que justo iba pasando un tipo que acababa de conseguir su licencia de salvavidas. Si no hubiese sido por él, Ikeda hubiese muerto entonces. 』
『 Subaru: Eso quiere decir… que la cerca que pusieron aquí fue culpa de papá y ese chico Ikeda, ¿verdad? 』
『 Kenichi: Nah, eso no puede ser… no, espera un momento. Ahora que lo pienso, pusieron esto poco tiempo después de aquel accidente. 』
Apoyándose contra la cerca, mirando en dirección al río, Kenichi recordaba aquellos tiempos pasados, mientras ladeaba la cabeza un tanto confundido. Detrás de su padre, Subaru, que parecía un poco aburrido, miraba los alrededores.
Era antes del mediodía, en un día laboral, así que era natural que no hubiera mucha gente caminando por ahí. O, para ser precisos, definitivamente no había nadie más en ese lugar aparte de Subaru y Kenichi. En todo caso, tampoco es como si ese fuera un sitio al que se pudiera llegar fácilmente. Y aunque alguien más anduviera por ahí a esas horas, probablemente sería el custodio o alguien que realmente amara ese lugar. Pero justo mientras pensaba aquello, Subaru escuchó unos pasos venir del césped.
『 ????: ¿Ooh? Me preguntaba quién podía ser. ¿Eres tú, Ken-bo? Vaya vaya, ¿todavía jugando por el río a estas alturas? 』
『 Kenichi: Hablando del diablo… Es el viejo de la cabaña del custodio. ¿Todavía no consiguen a alguien que te reemplace? Aunque deberías estar agradecido, ya que hoy ando con mi ropa de playa en vez de mi ropa de río, por lo que no podría meterme ahí dentro aunque quisiera. 』
『 Viejo: No me vengas con esas. Eras tú quien decía que no había ninguna diferencia entre ropa de playa y ropa de río, y te metías al río simplemente en ropa interior. Pero, ahora que lo pienso, ha pasado bastante tiempo desde la última vez que te vi. 』
Subiendo por la pendiente, un bajo y encorvado viejo saludó a Kenichi, dándole la mano. Tenía la apariencia de un agradable abuelo y llevaba puesto un antiguo y verde uniforme. A juzgar por la conversación que acababan de tener y el logo que llevaba en la espalda, él debía ser el cuidador de la ribera del río.
De hecho, si conocía a Kenichi de aquellos tiempos cuando se divertía en el río, debía ser un veterano en ello.
En esta largamente esperada reunión, los dos reían a carcajadas mientras hablaban y, entonces, el viejo golpeó ambas palmas de sus manos.
『 Viejo: Oh, es verdad. Ya que estás aquí, ¿dónde está ese amigo tuyo, Ikeda? Ese chico se dejaba llevar por el río todo el tiempo, incluso mi red se estaba desgastando de tantas veces que tuve que usarla para atraparlo. 』
『 Kenichi: Ese bastardo de Ikeda ganó el premio gordo en unas carreras de caballos hace 10 años y tomó todo su dinero y se fue a vivir a Tailandia. No he sabido nada de él desde entonces, salvo en las cartas que envía para año nuevo, verano, invierno, navidad, día del padre, día de la madre y alguna otra festividad aleatoria como esas. 』
『 Subaru: Esa parece bastante correspondencia para alguien de quien se supone no sabes nada desde entonces. 』
Incapaz de resistirse, Subaru murmuró aquella observación. Entonces, escuchando ese bajo murmullo, el viejo miró a su alrededor, arqueando las cejas como si recién ahora se diera cuenta de la presencia de Subaru.
『 Viejo: Anda, pero si tienes un pequeño acompañante aq— ¿eh? ¿Podría ser que éste sea tu…? 』
『 Kenichi: Sí, así es, él es mi hijo. No, más bien debería decir, mi QUERIDO HIJO. 』
『 Viejo: Ooh, ¡ya veo! Con razón me recordaba a ti cuando eras joven. Aunque no se parecen tanto. No ha salido a ti. Salió más parecido a su madre… ¿no? 』
『 Kenichi: Sí, sí, sí. Todos me dicen lo mismo. En especial los ojos. 』
La parte más notoria de su cara, sin la cual no tendría nada destacable en ella, eran sus ojos sanpaku. Los ojos de su madre eran tan afilados, que parecía que tuviera vigas de acero en su interior y, esta parte específica de él, se encontraba claramente influenciada por su madre.
Con aquel inofensivo comentario, el viejo caminó hacia Subaru.
『 Viejo: Ya veo, ya veo. En todo caso, se trata de algo bastante sorprendente. Así que Ken-bo ya tiene un hijo así de grande. El tiempo pasa sumamente rápido. Lo que también significa que me estoy volviendo viejo. Si Ikeda volviera a ser arrastrado por la corriente, dudo que fuera capaz de volver a salvarlo. 』
『 Subaru: Incluso si se trata de Ikeda, dudo que fuera a meterse en el río para ser arrastrado por la corriente con la edad que tiene. 』
『 Viejo: Realmente espero que sea así. Después de todo, eran unos mocosos que nunca se quedaban tranquilos. Especialmente tu padre. En esa época iba generando problemas por todos lados. De todas formas, ¿están paseando por la ciudad a estas horas del día? 』
『 Subaru: Sí, bueno… 』
Subaru murmuró aquella respuesta. Pero al escucharle hablar, el viejo le miró como si se hubiese dado cuenta de algo. Y, arqueando sus tupidas y frondosas cejas,
『 Viejo: ¿Mmm? No pareces estar enfermo… y hoy es lunes, ¿verdad? Así que, ¿por qué estás paseando a estas horas por la ribera del río con tu papá? 』
『 Subaru: —¡gh! 』
Habiéndole hecho la pregunta que había estado intentando evitar, la expresión de Subaru se endureció de dolor.
Y, justo en ese momento, el mismo dolor de cabeza agudo y perforante que había sentido en su habitación, regresó. Involuntariamente, sufriendo un dolor insoportable, se llevó las manos a la cabeza, apretó los ojos con fuerza y dejando salir un 『 ¡Discúlpeme! 』, le dio la espalda al anciano y salió corriendo.
『 Kenichi: Ah, ey, ¡ey, Subaru! Lo siento abuelo, te lo explicaré la próxima vez que nos veamos. 』
『 Viejo: Ah… vale. Parece que dije algo que no debía. Dile a tu hijo que lo siento mucho. 』
Ninguna de esas palabras alcanzó sus oídos. Lo único que Subaru quería, era escapar de ese dolor aplastante que sentía en su cabeza. Escapar a algún lugar en que su frecuencia cardíaca se tranquilizara. Cualquier lugar alejado del río.
『 Kenichi: No necesitas disculparte por nada. —Después de todo, es su problema. 』
Dijo en un tono apenas perceptible para el oído.
※ ※ ※ ※ ※
『 Kenichi: Toma. Una deliciosa gaseosa refrescante llena de amor. Bien sacudida para que sea extradeliciosa… o eso me gustaría decir, pero, parece que éste no es el lugar adecuado para eso creo. 』
『 Subaru: …Las escenas llenas de amor no salen de las máquinas expendedoras. Pero gracias. 』
Recibiendo la lata y sintiendo que estaba fría con sus palmas, Subaru colocó un dedo en la pestaña. Luego, con una cierta consideración, cerró los ojos, apuntó la lata lejos de cualquier persona presente, y tiró de la pestaña con su dedo —haciendo que la espuma y el líquido salieran disparados por la abertura con una increíble fuerza. Al instante la lata en su mano perdió un tercio de su peso.
『 Kenichi: Ey ey, maldita sea, fallé por poco. Incluso dije algo sobre sacudirla de antemano para dar la impresión de que no la había sacudido, cuando en realidad sí que lo había hecho, usando una supertécnica de psicología inversa. 』
『 Subaru: Ya he visto ese PATTERN antes, ¿cuántos años crees que nos conocemos, papá? Saber que es imposible que no sacudieras la lata, también es una especie de advertencia por sí misma. Agh, mis manos están pegajosas. 』
Sacudiendo la gaseosa desbordada, que se estaba derramando sobre sus manos, Subaru ligeramente llevó la lata hasta sus labios. El sabor de la carbonatada bebida pasó a través de su boca, salpicando y apagando la sed de su garganta.
Ojalá aquel profundo malestar dentro de su pecho también pudiera ser calmado. Pero, lamentablemente, la pesadez todavía permanecía allí.
『 Kenichi: ¿Así que, ya te calmaste un poco? 』
『 Subaru: …Es difícil de decir. 』
Respondiendo a la pregunta, Subaru se desplomó sobre el banco, dejando escapar un largo suspiro mientras bajaba los hombros. De pie frente a Subaru, también bebiendo una gaseosa, Kenichi cerró uno de sus ojos como si estuviera pensando en algo.
Después de haber huido de la conversación en aquella pendiente, Subaru y su padre llegaron a un parque infantil no muy lejos del río. Naturalmente, aquí tampoco había gente, ni siquiera padres que de repente tomaran largas vacaciones de verano languideciendo en los columpios o algo así.
『 Kenichi: De alguna manera, siento que, incluso si subiera en los columpios, ahora no sería capaz de reír como solía hacerlo. ¿Qué harías, Subaru, si papá se subiera en los columpios al regresar de la tienda de comida? 』
『 Subaru: Tomaría una foto con mi teléfono y la subiría a Twitter. El tweet sería «Mi padre ha sido liberado de la gravedad». 』
『 Kenichi: Oooh, Twitter. Papá también tiene Twitter ¿sabías? Yo sigo y me sigue mucha gente, la pantalla ahora es un completo desastre. 』
Al oírle decir esto felizmente, Subaru vio a Kenichi de reojo, antes de soltar un suspiro lánguido mientras buscaba un tema de conversación. Cualquier cosa, siempre y cuando fuera algo distinto de lo ocurrido en la orilla del río――si volviera a pasar por eso otra vez, su cráneo gritaría.
Los intervalos cada vez más cortos entre sus dolores de cabeza le preocupaban, pero al igual que la forma en que reaccionaba a su debilidad, sólo podía reprimir e ignorar la sensación tan obstinadamente como podía.
『 Subaru: …Sólo fuiste a comprar unas bebidas de la máquina expendedora, ¿qué te tomó tanto tiempo? 』
『 Kenichi: ¿Mmm? Nada en realidad. Sólo estaba esta chica de secundaria que se saltaba la escuela perdiendo el tiempo delante de la máquina expendedora. Le di una conferencia acerca de volver a la escuela, le compré una bebida, intercambiamos direcciones de correo electrónico y me despedí de ella. 』
『 Subaru: En serio no puedo creer cómo puedes obtener la dirección de correo electrónico de una chica tan rápido. 』
Obtener el correo electrónico de una chica de secundaria era tan natural para él como ir al baño. Realmente, no tenía palabras para describir esa habilidad. Viendo a Subaru así, Kenichi ladeó la cabeza, 『 ¿De verdad? 』
『 Kenichi: Las direcciones de correo electrónico… ellas las entregan demasiado fácilmente ¿no crees? El número de chicas de secundaria en mi lista de contactos debe estar alrededor de los 3 dígitos. 』
『 Subaru: Incluso si junto a todos mis contactos, no sé si llegan a 2 dígitos; y tú tienes 3 dígitos sólo de muchachas de secundaria; tenemos definiciones diferentes para la palabra «dígitos» o algo así. Y papá, no le hiciste nada inapropiado a ninguna de esas chicas de secundaria que acabe con nosotros viéndote en las noticias, ¿verdad? 』
『 Kenichi: ¿De qué estás hablando? 』
Kenichi levantó ambas manos ante la sospecha de Subaru y se encogió de hombros para demostrar su asombro.
『 Kenichi: No es como si fuera a coquetear con pequeñajas como chicas de secundaria. El objetivo de mi amor fue determinado hace mucho tiempo, mis pasiones sensuales están reservadas sólo para mi familia. 』
『 Subaru: ¡Si lo categorizas así, yo también sería un objetivo! 』
『 Kenichi: …Bueno, pero eso es porque te quiero. Sólo tenemos ONE CHANCE de vivir, ¿no? 』
『 Subaru: ¡Dios no! ¡¡¿Qué estás diciendo?!! 』
JIA JIA.
Kenichi se echó a reír mientras Subaru gritaba eso.
Aunque la forma en que se reía sonaba vulgar y ruda, no transmitía un mal sentimiento. De hecho, lo mismo ocurría con todo lo que Kenichi hacía.
Su comportamiento era poco convencional, muy dramático, de los que hacen que la gente sienta pena ajena; pero la gente lo veía con buenos ojos por alguna razón.
Hoy, caminando con su padre por primera vez en mucho tiempo, Subaru pudo experimentar aquella sensación de primera mano.
Sólo caminando por la calle, Kenichi se había detenido a conversar con más gente de la que podía ser contada con una sola mano. No importaba a dónde fuera, había alguien con quien compartir viejos recuerdos, e incluso si acababa de conocer a la otra persona, pronto se llevarían de lo más bien, gracias a su aire tranquilo. Y él tampoco lo ocultaba.
Palpitante, el dolor regresó a sus sienes, y la respiración de Subaru se volvía inestable con cada respiro.
Los feroces dolores ya no venían de vez en cuando, sino que ahora llegaban cada dos por tres.
Como si el interior de su cráneo estuviera siendo atravesado por agujas, no era algo que pudiera curarse dejándolo pasar por alto. Pero no era como si en el hospital pudieran hacer algo con ese dolor.
Incluso si no podía entender las razones de su dolor, sabía la causa.
¿Qué otra cosa podía ser, excepto por las emociones que oprimían su pecho, y la asfixiante y sofocante sensación que lo acompañaba?
『 Kenichi: Pareces enfermo, Subaru. ¿Quieres que te lleve a cuestas de vuelta a casa? 』
『 Subaru: No necesito ser cargado, ni volver a casa. Sería igual incluso si volviera allí. 』
Más bien, el estado de Subaru sólo empeoraría si viese a su madre Naoko en casa.
Estaba empezando a entender lo que era ese dolor, y lo que lo empeoraba. Si lo que él imaginaba era correcto, entonces cuando viera a Kenichi y a Naoko otra vez, el dolor aumentaría al máximo. En otras palabras,
『 Subaru: Finalmente, incluso mi propio cuerpo, me está dando una reprimenda. 』
Huyendo sin cesar de la culpa, tal vez, su cuerpo finalmente le estaba gritando en respuesta.
El terror del tiempo gastado sujetándose las rodillas dentro de su habitación, mirando el segundero del reloj. La implacable ansiedad y los agudos y penetrantes dolores que persistían incluso después de que el plazo había pasado.
El enfermizo malestar, como si alguien estuviera gritando en el interior de su cráneo, gritando acusaciones sobre Subaru y en lo que se había convertido.
——¿Quién eres tú y de dónde has venido? ¿Y qué se supone que sabes de mí en todo caso?
『 Kenichi: Oye, Subaru. —¿Hay alguna chica que te guste? 』
De repente, el silencioso Subaru fue atacado con este tema de nuevo.
Era la misma pregunta que le había hecho en su habitación, el comienzo de aquella broma sin gracia. La primera vez, había sonreído irónicamente y lo había refutado, pero ahora, por segunda vez, de alguna manera el tema le ponía de los nervios.
Ayudado por el despiadado dolor en su cabeza, irritadamente trató de devolver la misma respuesta que en ese entonces, cuando—
《 ——Subaru 》
De repente, de algún lugar, creyó oír una voz que recordaba a una campanilla de plata, haciendo que su corazón diera un gran vuelco.
『 Subaru: ¿—? 』
Alzando su rostro, buscó la fuente de aquel susurro. Pero, aun así, sus ojos no podían encontrar a la dueña de esa voz, y la única persona en el parque además de Subaru, era Kenichi, de pie delante de él.
Kenichi, viendo el repentino movimiento de Subaru, también alzó las cejas, sorprendido.
『 Kenichi: ¿Qué pasa? Parece que hubieras escuchado a una hermosa chica, que no está aquí, llamarte repentinamente por tu nombre. 』
『 Subaru: Incluso si ese fuera el caso, realmente no tengo una respuesta para eso. Justo ahora, ¿alguien dijo mi nombre? Papá, no habrás aprendido a hacer que tu voz sonara como la de una hermosa chica mientras yo no estaba viendo, ¿verdad? 』
『 Kenichi: Tu papá sabe todo tipo de pequeños trucos, pero no uno como ese. Vale, voy a empezar a practicar y te lo mostraré la próxima vez, dejaré que lo oigas dentro de un mes más o menos. 』
『 Subaru: No te estoy pidiendo que aprendas a hacer eso. Cielos, ¿qué pasa contigo? 』
Poniendo fin a las palabras de su padre, Subaru apartó la mirada y recordó la voz que había oído una y otra vez en su mente. La voz, como el tintineo de una campanilla de plata, era suave, pero su sonido hacía que Subaru se agitara al escucharla, y en ese instante, por un momento se le olvidó el palpitante dolor de su cabeza.
Desde algún lugar, desconocido para él, llegó aquella voz de salvación ——como el melodioso canto de una diosa, aplacó el sufrimiento de Subaru, su expresión se calmó un poco y su respiración se hizo ligeramente más constante.
『 Kenichi: Bueno, mi pregunta de antes. ¿Hay alguna chica que te guste? 』
『 Subaru: …Pero a qué viene eso. ¿Qué harías tú con la respuesta de todos modos? Incluso si hay una y te digo su nombre, no es como si la conocieras. 』
『 Kenichi: Nunca se sabe ¿verdad? Es posible que tenga la dirección de correo electrónico de la chica que te gusta en mi teléfono celular, ¿sabes? 』
『 Subaru: Si la chica que me gusta le diera su dirección de correo electrónico a mi papá, incluso si se tratara de un amor de cien años, se terminaría enfriando. 』
Al ser evadido con esa frase, Kenichi hizo una mueca en sus labios con un 『 ¿¿Qué~?? 』. Viendo ese gesto que realmente no le quedaba bien a un hombre de mediana edad, Subaru bebió lo último de su gaseosa.
『 Subaru: No tienes que ser tan indirecto al respecto, ¿sabes? ¿Por qué no me preguntas directamente? …Como, ¿por qué no voy a la escuela? 』
『 Kenichi: Bueno, estoy tratando de ser considerado por una vez, realmente eres un niño que no puede leer el ambiente de la conversación. 』
Sonriendo forzosamente ante las palabras de Subaru, Kenichi continuó.
『 Kenichi: Bueno… Es verdad que quería preguntarte eso, así que no estás del todo equivocado. 』
『 Subaru: Yo también pienso en eso… que no debería ser así. 』
『 Kenichi: Pensar no siempre es necesario. Las cosas que pensamos son sólo ideas vacías y, de un modo u otro, siempre habrá algo en lo que no pensemos, algo que pasemos por alto. 』
Viendo a Subaru desviar los ojos y contestando tranquilamente con esa excusa, Kenichi también se bebió el resto de su gaseosa, y se sentó a su lado. El banco de madera crujió y una ráfaga de viento pasó entre ellos.
Y así, ambos miraron en la misma dirección, sin verse los rostros entre ellos.
『 Kenichi: Realmente no sé lo que el resto del mundo pensará, pero no creo que la escuela lo sea todo. Te lo dice alguien que ni siquiera se tomaba la escuela en serio en primer lugar. Incluso me salté mi propia ceremonia de graduación de la escuela secundaria, ¿sabes? Mi hermana tuvo que traerme mi certificado de graduación después de eso. 』
『 Subaru: He oído esa historia tantas veces… Mi tía que es 2 años más joven que tú fue a la misma escuela, así que cuando se graduó, ellos también le dieron el certificado de papá a ella. Incluso se me han endurecido los oídos de tanto oírlo. 』
『 Kenichi: Bueno, seguirás escuchándolo hasta que te crezcan callos. Así que, debido a que yo era así, realmente creo que está bien si no vas a la escuela porque no quieras. Pero, a mi edad, siento que perdí algo importante al no tomarme la escuela en serio, aunque dudo que puedas entenderlo todavía. 』
Kenichi parecía mirar algún lugar lejano mientras decía aquello. Mirando de reojo su expresión seria, Subaru tuvo la sensación de que su padre era realmente injusto, después de todo.
Siempre actuando como si fuera un idiota, y luego, en un lugar como éste, de repente te hace preguntar dónde están sus payasadas.
『 Kenichi: De todas formas está bien… ¿no es así? Hoy en día, la gente puede vivir unos 80 años en promedio. De esos 80 años, desperdiciar uno o dos años holgazaneando o en sabático no es la gran cosa. Volver a tomar el ritmo es fácil mientras eres joven. Lo bueno es que mi salario sigue intacto. 』
Haciendo girar su dedo, Kenichi mostró una perturbadora sonrisa.
Sin mirar a Subaru, que no había hecho ningún sonido desde que había empezado, se cruzó de brazos y asintió con la cabeza.
『 Kenichi: Estar vivo significa que de vez en cuando tendrás problemas a los que no podrás encontrar respuestas. Cuando tengo problemas como esos, comienzo a correr como un pollo sin cabeza buscando una solución, pero supongo que también es posible encontrar respuestas dando vueltas en una habitación. No voy a culparte mientras sigas esforzándote en encontrar tu respuesta. Pero si veo que empiezas a rendirte, entonces tendré una o dos cosas que decirte. 』
『 Subaru: …¿Por qué? 』
『 Kenichi: ¿Mmm? 』
『 Subaru: ¿Por qué de repente sientes que debes decirme todo esto hoy? No hay nada diferente, no es un día especial ni nada. Hoy simplemente es el día de las arvejas verdes. 』
『 Kenichi: Había muchas arvejas en ese plato, ¿eh? 』
Su boca se estaba secando rápidamente, a pesar de haber terminado de beber su gaseosa recientemente.
Tomando respiros irregulares, Subaru ansiosamente esperó la respuesta a su pregunta. Al notar la irritabilidad de Subaru, Kenichi estiró su cuello con un 『 Mmm, pues… 』.
『 Kenichi: Me pregunto por qué. Tal vez fue porque tengo el día libre, o porque inadvertidamente pensé en aquello mientras me frotaba con la toalla esta mañana, o porque el horóscopo para Acuario hoy decía que me encontraba «en perfecta sintonía»… o porque tu cara esta mañana parecía… es sólo un poco, pero parecía tener mejor aspecto de alguna manera. 』
『 Subaru: Mi cara… ¿mejoró? 』
『 Kenichi: Me refiero a tu expresión. Tu rostro seguía igual que siempre, con la misma mirada aterradora de tu madre. 』
Kenichi hizo una cara de miedo al arrastrar las comisuras de sus ojos con los dedos, y luego, diciendo 『 No sólo eso 』, señaló con los mismos dedos a Subaru.
『 Kenichi: No sé lo que pasó, pero no pareces alguien que se la haya pasado encerrado en su habitación. A juzgar por lo que dijo tu mamá, tampoco saliste ayer, así que, definitivamente deberías verte como alguien encerrado en una habitación, ¿verdad? 』
『 Subaru: …Pues, supongo que sí. Incluso he estado navegando en el gran océano de internet. 』
『 Kenichi: Si la gente pudiera crecer de esa manera, el número de chicas-corderitas-perdidas que vienen a contarme sus cosas en Twitter debería disminuir en vez de aumentar. 』
『 Subaru: Así que incluso has estado haciendo eso. 』
Aunque estaba asombrado por la extensión de los tratos de su padre, Subaru no quería que Kenichi se desviara del asunto principal.
Por otra parte, Subaru realmente no tenía idea de lo que Kenichi quería decir con eso.
La verdad era que, tal como su madre mencionó en su testimonio, ayer y antes de ayer Subaru únicamente desperdició su tiempo con indulgente pereza.
Decir que de repente hoy, en el lapso de un solo día, la atmósfera alrededor de él había cambiado…
『 Subaru: Papá, debes haberte equivocado, o puede que no me hayas mirado con atención antes 』
『 Kenichi: ¡Esa última parte realmente me duele! ¿Sabes que todavía estoy usando esa imagen con la «preciosa sonrisa diabólica» que tenías cuando eras pequeño como protector de pantalla en mi teléfono celular? 』
『 Subaru: Dejando de lado lo de «preciosa», lo de «sonrisa diabólica» me hace pensar en lo espantosos que debían ser mis ojos incluso de pequeño. 』
En cualquier caso, no había duda de que Kenichi se había equivocado.
Ayer seguía siendo ayer, y hoy seguía siendo hoy. Subaru todavía pasaba su tiempo sin haber cambiado nada en absoluto.
Está bien si es así, pensó, pretendiendo seguir siendo de la misma manera. Si seguía así, seguramente, un día, Kenichi y Naoko también entenderían—
—Lo que Subaru realmente quería.
『 Subaru: ¡——Dddagh! 』
Cuando pensó eso, el dolor le golpeó de nuevo como si chispas ardientes volaran en frente de sus ojos.
Un choque como si alguien le hubiera golpeado con el puño, como si su cerebro estuviera sobresaliendo de su cráneo, su cabeza crujió y sus ojos giraron, y el cuerpo sentado de Subaru se desmoronó.
Los latidos de su corazón se aceleraron de nuevo como una campana de alarma, y pudo oír el sonido del pulso de su sangre palpitar en sus oídos. Su vista se volvió borrosa, comenzó a ver doble y triple.
Comenzó a sentir náuseas, y en el fondo de su pecho un incomprensible calor abrasador afirmaba su presencia.
Cada una de estas sensaciones, a su manera, atormentaban su propia existencia; como acusaciones hirvientes que gritaban y gemían.
『 Kenichi: Ey ey, esta vez parece muy serio. ¿Estás bien, Subaru? 』
Incapaz de ignorar lo mal que se encontraba, Kenichi colocó su mano en el hombro de Subaru con una mirada preocupada en el rostro. Sintiendo ese tacto, Subaru finalmente levantó la cara, mientras el sudor emergía de su frente,
『 Subaru: Aah… no, estoy bien. Yo sólo estaba un poco mareado, eso es todo. 』
《 ——Ha sido duro, ¿verdad? 》
『 Subaru: ¡¿—?! 』
Una vez más, cada cabello del cuerpo de Subaru se erizó cuando la voz que sonaba como el tintineo de una campanilla de plata resonó en sus oídos.
Amable y tierna, la voz se llenó de afecto y preocupación. Su corazón tenso se derritió ante ese cálido sonido y, como si fuera la cura de su sufrimiento, el dolor, la presión de su cabeza, el calor y el coro de gritos cesaron.
¿Qué era esa voz? ¿Y por qué hacía retroceder el dolor y la agonía? Le resultaba familiar, como una voz que él conocía. Como si la deseara. Anhelando y deseando, buscándola y persiguiéndola, aferrándose a ella, perdiéndola, luego recuperándola de nuevo——
《 Gracias, Subaru. 》
『 Subaru: Tú eres… 』
La imagen de su pelo plateado, ondeando con el viento, surgió detrás de sus párpados. La luz de sus ojos color amatista miraba directamente a la cara de Subaru, y cada sonido de sus labios lo llenaba de amor y anhelo.
《 Por ayudarme. 》
——¿Qué está pasando, qué está pasando, qué está pasando, qué está pasando, qué está pasando?
——¿Quién es, quién es, quién es, quién es, quién es, quién es, quién es, quién es, quién es?
——¿Podría ser ella la causa de mi agonía? Mi dolor, mi tormento, estos sentimientos tan amargos que daban ganas de vomitar… ¿podrían ser todos a causa de ella?
《 ——Subaru. 》
No podía respirar. Su garganta le quemaba. Algo se estaba acumulando detrás de sus ojos.
《 Qué remedio, entonces. 》
La punta de sus dedos temblaba. No le quedaban fuerzas en sus piernas. Tenía la garganta cerrada como si sus pulmones estuvieran convulsionando.
《 Siempre tratas de ocultarlo de ese modo, Subaru. 》
Cubriéndose el rostro con sus manos temblorosas, conteniendo los sollozos de su cerrada garganta y el calor que quemaba sus ojos, Subaru——
《 ¿Por qué, me ayudaste? 》
——La respuesta ya estaba en mi corazón.
Cuando se dio cuenta de eso, todo el malestar que se arremolinaba dentro de él se desvaneció.
El crujido de su cráneo, la creciente náusea y sus ganas de vomitar, el mareo que hacía que viera el mundo inestable, el frenético latido de su corazón… todos se detuvieron como si se estuviera despejando el camino de Natsuki Subaru.
Levantando el rostro, se secó las lágrimas que estaban a punto de caer. Mirando fijamente sus mangas mojadas —el único rastro que quedaba de sus lágrimas— como dejándolas de lado, giró su muñeca y cerró con fuerza la mano en un puño. Y entonces,
『 Subaru: Lamento haber hecho que te preocuparas. Estoy bien ahora. 』
『 Kenichi: ¿En serio? Bueno, es genial que por fin te hayas calmado. No hagas que los demás se preocupen, cielos. 』
『 Subaru: Sí, culpa mía. Y sobre la pregunta que hiciste antes… 』
Quitando la mano de su padre de su hombro, Subaru se giró hacia él.
Sentados uno al lado del otro sobre aquel banco, Subaru miró directamente a la cara de su padre. Pensándolo bien, después de todas las conversaciones de hoy, era la primera vez que miraba directamente el rostro de su padre.
Huyendo incluso en un lugar como éste, no pudo evitar sonreír irónicamente ante su propia debilidad dentro de su corazón. Luego, volviéndose hacia su padre, que ahora tenía un signo de interrogación sobre su cabeza, Subaru,
『 Subaru: ——Hay… una chica que me gusta. Así que ahora ya estoy bien. 』
Contemplando el rostro que había quedado grabado detrás de sus párpados, la convicción de Natsuki Subaru para enfrentarse a su pasado fue sellada.