Traducción:
Jorge
Corrección y edición:
Miguel (Primer corrector)
Carlos (Segundo corrector)
Pretinaverse (Detallitos por aquí y por allá)
※ ※ ※ ※ ※
『 ???: …Bueno, comencemos. 』
Emilia permitió que su preciosa y clara voz resonara a través de la habitación mientras mantenía una expresión ligeramente tensa.
Con su voz que recordaba al tintineo de una campanilla plateada, se dirigió a todos en la sala… o quizás lo hizo para convencerse a sí misma; en cualquier caso, levantó sus delicados brazos.
『 Emilia: … 』
Con los ojos cerrados, Emilia empezó a concentrar su maná en sus manos alzadas.
El enorme poder mágico exigía una concentración de la misma magnitud; de manera que, en caso de no ser suficientes, Emilia no lograría el objetivo para el cual sólo ella estaba capacitada.
『 Emilia: … 』
Con una expresión solemne, Emilia enfrentó su gran magia mientras incontables miradas se enfocaban en ella. Las mujeres y los niños estaban reunidos juntos, observando sus acciones mientras contenían la respiración.
Algunos tomaban la mano de quien estuviera al lado, mientras otros tenían los ojos cerrados como si rezaran o pidieran un deseo; mientras temblaban, sólo compartían esperanza y ansiedad.
『 Subaru: …Debe ser duro. 』
Y, en el último extremo de aquella sala, Subaru observaba silenciosamente a Emilia, sobre la cual recaían muchas emociones complejas.
El lugar donde se encontraban era una instalación bajo tierra en la Ciudad de Priestella.
Originalmente había sido un almacén para provisiones de emergencia. En su estado actual, espacioso y casi vacío, resultaba ideal para su nuevo propósito. Al no quedar nada en el almacén de piedra, su amplitud parecía enfatizar la sensación de frío y desolación.
Sin embargo, precisamente porque era ese tipo de lugar, debería ser útil para su actual propósito.
『 Subaru: Aunque yo no diría que eso sea algo bueno. 』
『 Beatrice: Deja de murmurar sentimentalismos, supongo. No sería bueno que alguien te escuchara, y además terminarás desconcentrando a Emilia, de hecho. 』
Al lado de Subaru, quien dejó escapar accidentalmente ese pensamiento, Beatrice le aconsejó.
La chica, que agarraba la mano de Subaru con su mano izquierda y con la otra jugaba con uno de sus rizos, contemplaba el blanco ritual frente a ella.
Sus ojos azul celeste parecían retener un sufrimiento cuyo origen era el propio Subaru.
『 Subaru: Tratándose de Emilia, seguro que saldrá bien. No te preocupes demasiado. 』
『 Beatrice: …No te equivoques, supongo. Betty no se preocupa por Emilia, sino por Subaru, de hecho. Empatizar con los sentimientos de literalmente todo el mundo es un mal hábito tuyo, supongo. 』
『 Subaru: Así que era eso. 』
La fuerza con la que lo sujetaba creció, y los labios de Subaru pusieron forma de へ.
Sabía lo que Beatrice quería decir, así como lo que le preocupaba. Sin embargo, su decisión se basaba en la determinación que ya había definido.
No podía ceder en eso, aun sabiendo que eso solo traería problemas.
『 Emilia: … 』
Lejos del intercambio de palabras entre Beatrice y Subaru, el ritual de Emilia continuaba.
Estaba concentrándose todo lo que podía, su respiración sonaba agotada y el sudor caía por su frente. Lo estaba dando todo con el fin de controlar las enormes cantidades de maná.
Una tenue luz azulada creada entre las manos de Emilia comenzó a envolver todo el almacén.
Aunque el aire gélido era suficiente para nublar la vista, el frío no atravesaba su piel, sino que arropaba gentilmente su corazón expuesto.
Había oído que la gente que sufría de hipotermia y estaban al límite de la muerte se olvidaban de la sensación de frío. El frío extremo arrebataba la percepción correcta de la temperatura en las personas, y les otorgaba calor como un regalo de despedida antes de arrancarles la vida del cuerpo.
Subaru pensó vagamente sobre si una situación así podría suceder en este ambiente blanco, pero inmediatamente agitó su cabeza negando tal posibilidad, tachándola de estúpida.
La pálida luz azul llenó por completo la estancia, y el aire gélido se concentró en su centro.
Y en medio de la luz había——
『 ???: … 』
——una enorme criatura negra yaciendo tumbada arropada con sus alas plegadas: un dragón.
Pero esa no era la única criatura extraña. También había moscas del tamaño de una persona, reunidas rodeando al dragón. Todas juntas creaban un escenario digno de pesadilla.
Sin embargo, Subaru no sintió asco.
——No. Más concretamente, él era plenamente consciente que no debía sentir asco hacia el dragón negro y las moscas humanas.
Todas ellas eran víctimas completamente inocentes.
Eran víctimas de la malicia de la Arzobispa del Pecado de la Lujuria, víctimas que habían sido transformadas en seres inhumanos.
Subaru y los demás no sabían cómo regresar sus cuerpos a sus formas originales. Por eso habían elegido esta medida.
『 Subaru: Quizás sólo estamos posponiendo lo inevitable, pero… 』
『 Beatrice: Nos dará tiempo, e incluso eso puede que sea su salvación, de hecho. Precipitarte sólo estrechará tu campo de visión, impidiéndote contemplar opciones que normalmente serías capaz de ver. No ser consciente de eso, o darte cuenta de ello más tarde… ambas opciones son una crueldad, supongo. 』
Beatrice contestó con algo parecido a un monólogo a los murmullos de Subaru.
Su pequeño y débil suspiro contenía una profundidad y sentimentalidad propia de aquellos que pasan mucho, muchísimo tiempo pensando.
Habiendo comprendido eso con sus últimas palabras, Subaru acarició su cabeza lentamente sin decir una palabra.
『 Beatrice: …¿Qué ocurre, de hecho? 』
『 Subaru: No es nada. 』
Sin importar cuánto tiempo se tomaran, no necesariamente serían capaces de tomar la decisión correcta.
Algunas veces, incluso si prolongas una decisión, no serías capaz de escoger la opción correcta.
No obstante, aún podemos actuar para sacar lo mejor de las elecciones que hacemos.
La respuesta que Subaru le había dado a la Beatrice, que había esperado durante 400 años, había sido así.
De la misma manera, él esperaba que el tiempo pudiera hacer lo mismo por la tragedia que había caído sobre esta ciudad.
『 Subaru: … 』
El clímax del frío que cubría el almacén se solapó con las fuertes emociones de Subaru, y finalmente el sonido del aire rompiéndose, o al menos así lo percibió él, resonó.
『 Emilia: …He acabado. Están a salvo. 』
Emilia se giró mientras exhalaba vaho.
Un poco sin aliento, ella agachó brevemente la cabeza. Detrás de ella, con sus cuerpos cubiertos de cristales blancos, estaban las vidas de todas las almas que habían sido encerradas dentro del hielo.
『 Subaru: …Gh. 』
Sus familiares estaban llorando, y los más cercanos y amados estaban gimiendo llenos de lágrimas.
Sus lamentos salieron antes que cualquier agradecimiento, y cruelmente hicieron eco en el sótano.
Durante mucho tiempo, sus lamentos continuaron resonando, como si su sufrimiento a estar separados de sus seres queridos no tuviera fin.
※ ※ ※ ※ ※
『 ???: Por ahora, parece que la propuesta de la señorita Emilia funcionó. Me pregunto si debería sentirme aliviado por ello. 』
Habiendo sido informado de la conferencia en el lugar de encuentro, así como del consecuente trabajo de Emilia para congelar a las víctimas de las mutaciones, Otto asintió pareciendo aliviado.
Se encontraban lejos de los refugios, en una habitación privada en un hospital, a donde Otto había sido llevado.
Su condición no había cambiado, con ambas piernas aún envueltas dolorosamente en vendas. Aun así, al menos había logrado dejar el tratamiento del hospital de campaña, y era posible decir que el estado de sus piernas había mejorado bastante.
Esencialmente, Otto era considerado una de las valerosas personas que habían contribuido a la defensa de la ciudad, por lo que habría estado bien que recibiera un tratamiento médico de mayor calidad. Sin embargo, Otto no se lo había mencionado al personal, por lo que Subaru optó por no decir nada, dado que probablemente estaba siendo considerado con las demás víctimas.
『 Subaru: Recibir hospitalidad sin usar las palabras… Ese es el verdadero significado de wabi-sabi. 』
『 Otto: Aunque estás aquí, Natsuki-san, tu mente está en otra parte como siempre; pero está bien… De todas formas, gracias por tu gran trabajo, Emilia-sama. 』
Sin tener en cuenta el asentimiento de Subaru, Otto agradeció a Emilia por su duro trabajo, quien había venido a visitarle. Ella levantó las cejas al oír su agradecimiento y…
『 Emilia: Nah, no te preocupes. Lamento haber tomado acción sin consultarlo contigo, Otto-kun; pero fue porque pensé que era algo que sólo yo podía hacer. 』
『 Otto: Ah, está bien. No estoy enfadado, ya que tus acciones fueron sin duda preciosas y bien intencionadas. Además, fueron muy valiosas incluso en un sentido más calculado. 』
『 Emilia: ¿Calculado? 』
『 Otto: Habría sido mejor si hubieras entendido a lo que me refería, pero incluso si no lo entiendes… No, cómo decirlo. Honestamente, me resulta difícil decidir qué habría sido mejor. 』
『 Subaru: No pienses; siente. Eso es E. M. T. 』
Emilia no era muy consciente del resultado de sus propias acciones. Con algunas palabras mágicas, Subaru apartó serenamente a Otto a un lado, quien quedó perplejo ante la actitud de Emilia, y se dispuso a continuar.
『 Subaru: Más importante, parece que no podrás usar tus piernas por un tiempo, ¿verdad? 』
『 Otto: En el estado actual de Priestella, sería difícil darles un tratamiento mejor, ¿no crees? La cantidad de usuarios de magia curativa en la ciudad no es suficiente para atender a todos los heridos. Tal vez sea mejor cambiar a un hospital en otra ciudad, pero parece que Kiritaka-san ya envió a tantos mensajeros como pudo a las ciudades vecinas pidiendo sanadores. Por eso, esperar aquí tranquilamente a que uno de esos sanadores venga quizás resulte ser más prudente que volver a la mansión… Jajaja. 』
Riéndose débilmente, Otto se vio forzado a retirarse de la primera línea de combate por un tiempo.
Sus heridas eran tan severas que sólo podrían ser sanadas por un mago experto. Tendría que ser alguien de nivel similar al de Beatrice —cuando ella aún se encontraba en la Biblioteca Prohibida— o Ferris.
『 Subaru: Ferris está constantemente atendiendo a Crusch, y nuestro capitán del escuadrón suicida capaz de sanar está deambulando por Priestella… Obviamente, es por esa familia. 』
『 Emilia: Aquellos tres, la madre y los dos hermanos, ¿cierto? La persona que tenía forma de dragón es el padre, así que era una familia de cuatro, o al menos eso tengo entendido. 』
Su capitán del escuadrón suicida —es decir, Garfiel— no estaba aquí ahora mismo.
Actualmente, se encontraba por la ciudad haciendo de voluntariado, trabajando tan duro como pudiera en repararla. Por naturaleza, Garfiel era un joven amable y directo. Incluso si no sintiera nada por la ciudad, si había personas en apuros, acabaría ayudándolas sin pensárselo.
Aun así, su compromiso con Priestella era sobresaliente. Y Subaru podía imaginar más o menos el motivo que había detrás.
『 Subaru: Que no nos lo dijera debe significar que las circunstancias son complejas. 』
『 Emilia: Sí, eso debe ser… Ah, cambiando de tema, ¿no crees que Garfiel y esa familia, se parecen? El color de ojos y cabello son completamente idénticos. 』
『 Subaru: Emilia-tan, sabes que no has cambiado de tema, ¿verdad? 』
『 Emilia: ¡¿Eh?! 』
Dejando a un lado a la sorprendida Emilia, Garfiel se encontraba en tales condiciones.
Bajo circunstancias normales, las lesiones que él había recibido por todo su cuerpo habrían hecho peligrar su vida, pero gracias a su Protección Divina de los Espíritus de Tierra y su fuerza física descomunal, no tenía intención de descansar.
Además, Mimi, quien no había dejado de preocupar a sus hermanos por sus heridas aún abiertas, acompañaba a Garfiel a donde fuera que se dirigiese.
『 Otto: Bueno… sobre los verdaderos sentimientos de Garfiel, imagino que un día él mismo nos los revelará. No necesitamos presionarlo. Pero más importante que eso… 』
『 Emilia: ¿Sí? 』
『 Otto: Ah, no, ya que ninguno lo había mencionado, yo tampoco dije nada, pero… ¿por qué la señorita Beatrice se ve de tan mal humor? 』
Ladeando su torso, Otto desvió la conversación hacia Beatrice, quien estaba en un rincón de la habitación del hospital hinchando sus rojas mejillas y agitando visiblemente su cabeza de izquierda a derecha con una mirada resentida en sus ojos.
Subaru asintió respondiendo 『 Aaah… 』.
『 Subaru: Es por eso; ya sabes. Está de mal humor porque fuimos al Maestro Restaurador por tu encargo y acabamos siendo rechazados… Visto desde múltiples puntos de vista, ¿no sería culpa tuya? 』
『 Otto: No; te estás pasando un poco ahí… ¿No es así, Emilia-sama? 』
『 Emilia: Sí, tienes razón. Es la obligación del contratante cuidar de su espíritu. Así que, quien debe de hacerse cargo de animar a Beatrice es Subaru. 』
『 Subaru: Hablas de animar, pero ahora que lo pienso, no tengo muchos recuerdos de Emilia-tan animando a Puck. 』
『 Emilia: ¡No seas tan quisquilloso! Además, yo he hecho miles de cosas por Puck cuando Subaru no estaba ahí para verlas. Como peinarle el pelaje, limpiarle las garritas, abrazarlo hasta que se quede dormido… 』
Era difícil que aquello pudiera ser mencionado como una manera de asociarse con espíritus, pero la expresión de Emilia al hablar de Puck se había vuelto alegre.
Desde su repentina y dolorosa despedida en el Santuario, Emilia solía tener una expresión de tristeza al recordar a Puck, pero ahora parecía haber superado esa etapa.
——El pecho de Emilia estaba adornado por un cristal hecho a partir de una gran piedra mágica incolora.
Tenía el mismo diseño que la que siempre llevaba antes de que fuera separada de Puck; y junto con la belleza de su expresión, parecía que hubiera vuelto la vieja Emilia.
Y tocando el cristal con uno de sus delicados dedos…
『 Emilia: Aún no tengo suficiente poder para traer a Puck de vuelta, pero… el contrato entre Puck y yo no se ha roto, así que podremos encontrarnos de nuevo cuando acumule suficiente maná para que pueda manifestarse. Sólo un poco más de paciencia, ¿sí? 』
『 Subaru: Eso fue también gracias a uno de los logros de Beako y… bueno, también a la amabilidad de Kiritaka. 』
La razón por la que Subaru y los demás habían venido a la ciudad de Priestella en primer lugar había sido para obtener una gran piedra mágica.
Normalmente él los habría rechazado o no tras algunas negociaciones, pero hubo un suceso inconcebible en la ciudad que derivó en esto. En cualquier caso, acabaron consiguiendo una como regalo, y estaban muy satisfechos.
『 Subaru: Así que anímate tú también, Beako. 』
『 Beatrice: No estoy de mal humor, supongo. Estás malentendiéndolo, de hecho. Jmf. 』
『 Emilia: Oh, Beatrice, qué adorable. 』
Haciendo lo posible para dejar salir un sonido fácil de entender, Beatrice apartó su mirada de Subaru, quien la estaba intentando animar de ese modo. Él también estaba de acuerdo con Emilia, quien sentía una excitación en su corazón ante tal escena; pero, hablar o no sobre la adorabilidad de Beatrice, era otra cuestión.
『 Otto: Al parecer el señor Darts tiene una actitud típica de artesanos. No puede dejar un trabajo a medio hacer una vez que lo ha aceptado. Entiendo ese tipo de actitud. 』
『 Subaru: Aun así, parece que ha llevado su profesionalismo al extremo. Parece que estuvo trabajando en su taller mientras ocurría todo el caos, ¿no? Es un adicto al trabajo. 』
『 Otto: Ese es el artesano dentro de él. 』
『 Subaru: El artesano dentro de él, ¿eh? 』
Realmente no entendía por qué Otto parecía estar orgulloso, pero cuando lo dijo así, parecía que le hacía sentirse bien; los chicos eran criaturas muy simples. La actitud de un artesano era algo genial.
Sin embargo, Beatrice dirigió una mirada furiosa a la conversación entre Otto y Subaru, y…
『 Beatrice: Sí, pero eso no significa que tenga derecho a ignorar las palabras de sus clientes, supongo. Incluso cuando dije que le pagaría el doble, no dijo ni una sola maldita palabra, de hecho. 』
『 Subaru: De todas maneras, ningún profesional seguiría las exigencias de una niña mientras lo abofetean con un fajo de billetes. Eso sólo funcionaría como recompensa para aquellos que no son profesionales. Díselo tú también, Emilia-tan. 』
『 Emilia: Sí, no deberías pensar así, Beatrice. Si vas a desperdiciar el dinero, me veré forzada a confiscar tus ahorros. 』
『 Beatrice: ¡Pero qué trato tan grosero de ambos, supongo! 』
La indignada Beatrice se envolvió entre las cortinas con el fin de esconderse tras ellas.
A continuación, Emilia no pudo resistirse más y abrazó a Beako EN la cortina, haciéndola gritar 『 ¡GÑÑÑÑAAA, DE HECHO! 』.
Dejando a un lado este animado intermedio, no era como si Subaru no entendiera los sentimientos de Beatrice.
Lo que Otto había encargado al Maestro Restaurador Darts, y lo que Subaru y los otros habían intentado recuperar, era el Libro de la Sabiduría. Era la razón por la que Roswaal había intentado interferir con el futuro adelantándose a Subaru——era natural estar interesado en lo que tenía escrito.
『 Subaru: Aunque ya no esté molestando, ese tipo podría aún estar tramando algo. 』
Aunque su sabotaje había sido descubierto, la actitud de Roswaal no había cambiado aparentemente.
Naturalmente, dado que él había conspirado tras esa actitud relajada, permanecer alerta era esencial. Sin embargo, también era cierto que el aire venenoso que solía rodearle se había desvanecido.
No obstante, no se le podría llamar aliado a quien tomaba el papel de un simple testigo.
『 Subaru: Si pudiéramos al menos saber lo que va a ocurrir con el Libro de la Sabiduría… 』
Si pudieran garantizar que los planes de Roswaal habían terminado, sin importar el pasado, sería mucho más seguro continuar adelante. Probablemente también tendría un efecto positivo en el futuro de la facción.
『 Subaru: Por eso quiero insistir en ello. 』
『 Otto: Aunque no soy partidario de hacer este tipo de excusas, Emilia-sama y yo tenemos más o menos las mismas opiniones que Natsuki-san, así que en ese aspecto estamos bien. En cambio, Garfiel… bueno, él tiene sus pesares personales, así que, aun conociendo los hechos, su actitud podría no cambiar. 』
¿Por «pesares personales» se refiere al Santuario o a Ram?
Sin tocar ese tema, Subaru lanzó una mirada a Emilia y Beatrice jugando juntas.
『 Subaru: Ese libro está también relacionado con Beatrice. Así que me gustaría confirmarlo si es posible. Sacarla de la Biblioteca Prohibida y dejar el pasado atrás son cuestiones diferentes. 』
『 Otto: ¿Sabes cuantas veces pensé en consultártelo? 』
『 Subaru: No te culpo por eso. 』
Subaru creía que recuperar el Libro de la Sabiduría, intentar restaurarlo e incluso haber intentado hacerlo todo por su cuenta, había sido una buena decisión por parte de Otto.
Y, básicamente, era difícil que la consideración de Otto estuviera errada. Subaru era consciente de que Otto no era una persona que antepusiera sus propios intereses por encima de los demás.
『 Subaru: Realmente no tienes madera de mercader. 』
『 Otto: ¡¿Podrías dejar de señalarlo?! Por otra parte, ¿qué hay del Señor Darts? 』
『 Subaru: Dijo «Puede que sea el trabajo más grande que haya tenido hasta ahora. Dejaremos el pago para después, por ahora me gustaría que me dejaran concentrarme en esto hasta entonces». 』
Era preocupante que Darts no respetara los tiempos acordados para la entrega; pero, a fin de cuentas, era un artesano comprometido con su trabajo.
Quería creer que no sería el tipo de artesano que abandonaba si la fecha límite había pasado.
『 Otto: Así que, al final, tendré que quedarme en Priestella para recuperarme y recoger el Libro de la Sabiduría. Parece estar todo decidido, ¿verdad? 』
『 Subaru: Garfiel también planea quedarse un tiempo para reparar y proteger la ciudad. No cabe duda de que los hemos expulsado, ¡pero eso podría ser una finta de su parte para atacarnos de nuevo! Ya que esas mierdas nunca renuncian. 』
El Culto de la Bruja parecía estar formado por el tipo de gente que haría el mismo daño una y otra vez.
Y parecía que Subaru no era el único que reconocía aquello, ya que ninguno de los que estuvieron involucrados habían bajado la guardia… lo cual también podría ser su objetivo para atormentarles con sentimientos de tensión.
『 Subaru: Aun así, de momento no podemos hacer nada más. 』
『 Otto: En cualquier caso, creo que necesitamos esperar para ver cómo se desenvuelve la situación. Tan pronto como recupere la movilidad, iré a revisar varias cosas. Sin embargo… 』
Otto interrumpió sus palabras mientras decía sus planes de futuro.
Levantó su torso con dificultad y miró a Subaru, quien había cerrado uno de sus ojos. Y mientras se daba golpecitos en la sien con un dedo,
『 Otto: Hablando claramente, estoy en contra. 』
『 Subaru: …Bueno, pensé que dirías algo así. 』
Ante la declaración de Otto, Subaru sonrió irónicamente.
Subaru había predicho que dijera eso y estuviera en contra.
Después de todo, Otto Suwen había evaluado a Subaru Natsuki correctamente.
Subaru era consciente más que nadie de su propia impotencia, pero no muchos podían entender sus defectos.
Puede que Beatrice y Otto. Quizás Patrasche un poco. Y aunque ahora no era el momento, podría ser que Ferris también lo hiciera.
Por eso, esperaba la oposición de Beatrice y Otto, de su misma facción. Si Patrasche pudiera hablar, seguramente se habría opuesto del mismo modo.
Sin embargo…
『 Subaru: Si me conoces tanto, ya deberías saber mi respuesta. 』
『 Otto: …Beatrice no estaría de tan mal humor sólo por el Señor Darts, ¿verdad? 』
『 Subaru: Bueno, no sabría decirte. Como podrías esperar, ni siquiera yo entiendo lo que ocurre en el fondo del corazón de Beako. 』
Cuando Subaru fingió su inocencia encogiéndose de hombros, Otto mostró una cara de exasperación.
Naturalmente, en lo que concernía a él y su agudo oído, no le faltaría el conocimiento de leyendas y rumores. Debía conocer muy bien los riesgos que planteaba la decisión de Subaru.
Y, adelantándose a lo que iba a decir Otto,
『 Subaru: Lo siento. Iré a ver al Sabio, o quien quiera que sea, con ese zorro blanco de guía por un tiempo. 』
Dijo sonriendo.
※ ※ ※ ※ ※
『 ???: ……Entra, por favor. 』
Cuando golpeó la puerta por cortesía, una voz calmada le contestó desde dentro.
Era una voz familiar, pero una a la que le faltaba espíritu. Subaru se sintió excesivamente molesto por ello.
『 ???: ¿Eres tú, Subaru? 』
『 Subaru: ¿Te molesta que entre? 』
『 ???: Es extraño, ahora que veo tu rostro, me siento terriblemente aliviado. 』
『 Subaru: Bluagh. 』
Entró en la habitación, y ese primer intercambio de palabras lo terminó con aquella acción.
Aun mostrando semejante actitud, había consideración en la manera en la que Subaru cerró la puerta tras él. Cerrándola sin hacer ningún ruido era la cantidad mínima de cortesía para aquellos que dormían dentro.
『 ???: Si se despertaran por el ruido, sería mejor. 』
『 Subaru: De ser así, ¿me darías una ronda de aplausos o algo? Una escena así, no tendría precio. Seguro que Glotonería se enfadaría mucho. 』
『 ???: Jmf. 』
Con una sonrisa relajada, Subaru inclinó su cabeza sin mirarle directamente. Entonces miró alrededor de la habitación, entrecerrando ligeramente sus ojos al ver las filas de camas.
Una cama simple, y una manta fina: esa era toda la caridad que se le había dado a la gente que dormía aquí. Y Subaru sabía dolorosamente bien que no hacía falta más.
La gente que dormía aquí había sido olvidada de los recuerdos, separada de la vida diaria, y sólo permanecía como los restos de seres imperfectos que no estaban muertos.
『 Subaru: Julius; no soy quién para decírtelo, pero no deberías pasar tanto tiempo aquí. 』
『 Julius: … 』
『 Subaru: Aunque sigas mirándolos, no puedes recordar lo que no puedes recordar. Eso se aplica tanto para una querida hermana pequeña, como para alguien que realmente es tu otra mitad. 』
Sin usar ninguna palabra de consuelo, Subaru le habló al joven —Julius—, quien estaba sentado al lado de una de las camas más lejanas y levantó su rostro, el cual aún estaba invadido por un lamento que no logró sacudirse de su hermoso rostro.
『 Julius: Entenderlo con mi mente o aceptarlo con mi corazón son cosas completamente distintas. No quisiera sonar arrogante, pero nunca me había considerado una persona dominada por sus emociones. Que no me haya dado cuenta de eso hasta ahora es una falta de conciencia de mí mismo. 』
『 Subaru: … 』
Mientras Julius hablaba, su mirada bajó hacia la cama justo a su lado.
Naturalmente, una de las víctimas que habían perdido su nombre dormía ahí, y su consciencia y recuerdos habían sido completamente borrados del mundo.
Por eso Julius Euclius no recordaba a esta persona——el joven de bello rostro con pelo violeta y que era su propio hermano pequeño: Joshua Euclius.
『 Julius: Así que… Joshua. 』
Conocía el nombre de su hermano pequeño porque Subaru se lo había dicho, así como la relación que tenía con él.
Las víctimas de la Autoridad de Glotonería——Cuando había sido informado que muchas personas en estado comatoso y sin identificar habían sido encontradas, Subaru estuvo convencido de que habían sufrido el mismo daño que Rem.
Aferrándose únicamente a la pequeña esperanza de que él no hubiera olvidado a aquellos olvidados, había ido al hospital y descubierto al durmiente Joshua.
『 Julius: Es extraño. A pesar del increíble parecido como para deducir nuestra relación sanguínea, y tras escuchar tu historia, dentro de mí no existe ningún recuerdo de mi hermano pequeño. 』
Julius cerró sus ojos sin mostrar emociones.
De entre las víctimas de Glotonería que fueron encontradas, Joshua era el único que Subaru conocía. Las más de 30 víctimas restantes continuarían durmiendo sin nadie que se lamentara por ellos o se preocupara por su bienestar.
En ese sentido, se podría decir que Joshua fue afortunado, ya que tenía a su hermano mayor preocupándose por él.
Aun habiendo sido olvidado por su tan querido y admirado hermano mayor, dicho hermano mayor había ido al hospital para aferrarse al amor fraternal que supuestamente debería haber entre ellos y hablaba de su hermano pequeño sin sentimientos en sus palabras.
Aunque había sido olvidado, aunque él le hubiera olvidado, aunque él no estuviera en sus recuerdos, aunque sólo hubiera hechos,… aquella escena partía el corazón.
『 Subaru: …Maldita sea. 』
Debería haberlo sabido. Realmente debería haberlo sabido.
Que el Arzobispo del Pecado con la autoridad de Glotonería era el mal más despreciable en este mundo.
Junto con Ira, quien retorcía las emociones de la gente a su voluntad.
Junto con Lujuria, quien rompía la dignidad de las personas, así como su forma, antes de pisotearlas.
Junto con Codicia, quien rechazaba a todo excepto a él mismo, imponiendo su egocéntrico sentido de omnipotencia.
Junto con Pereza, quien se consentía a sí mismo con el uso de la palabra diligencia para teñir las vidas de los demás con su amor egoísta.
Eran el peor mal sin duda, ni uno de ellos se merecía vivir.
Era inconcebible soportar a esos seres que profanaron las vidas de absolutamente todos tal y como Glotonería hizo.
『 Subaru: …Quedarte aquí sólo te deprimirá. No me hagas repetirlo. 』
Únicamente pasaban por su mente cosas desagradables.
Con indignación en su lengua, Subaru le habló a Julius, quien se levantó al escucharle y tocó el pecho de su hermano pequeño que le resultaba totalmente desconocido.
『 Julius: Está… respirando. Está vivo. Es extraño. 』
『 Subaru: Así es. No necesita comer, ni ir al baño, ni lavarse… pero tampoco puede reír. 』
『 Julius: Tampoco puede sentir tristeza por ser olvidado… Eso quizás sea afortunado. 』
『 Subaru: ¿Afortunado? 』
Subaru levantó las cejas en respuesta a las palabras de Julius.
Devolviéndole la mirada, Julius relajó las comisuras de sus labios ligeramente y, mientras ofrecía una débil sonrisa,
『 Julius: Si no te das cuenta de que has sido olvidado, no temerás el miedo de haber sido dejado atrás. Es realmente difícil soportar que las relaciones cercanas con otras personas… hayan sido cortadas por un extremo. 』
『 Subaru: … 』
『 Julius: Subaru. Olvidar o ser olvidado… me pregunto cuál es más doloroso. 』
『 Subaru: ¿Cómo…? 』
Su garganta se bloqueó ante esa pregunta.
No era porque no supiera la respuesta, ya que Subaru sabía perfectamente la respuesta a lo que se preguntaba Julius. Por lo tanto, lo que obstruyó las palabras de Subaru no había sido el desconcierto, sino la indignación.
Miró a Julius, quien tenía una sonrisa cínica en su mirada.
『 Subaru: ¿Cómo podría saberlo? No digas tonterías, deja de abstraerte en estas cosas. 』
『 Julius: …¿Subaru? 』
『 Subaru: ¿«Olvidar o ser olvidado»? ¡A LA MIERDA LAS DOS! ¡NO INTENTES DARLE UN ORDEN A COSAS TAN DOLOROSAS, ¿ERES ASÍ DE NEGATIVO?! PONIENDO ESA MALDITA CARA COMO SI FUERAS LA PERSONA MÁS DESAFORTUNADA DEL MUNDO… ¿QUIERES COMPARAR TU MALA SUERTE HASTA AHORA CON LA MÍA? ¡EN CUALQUIER CASO, YO SIEMPRE TE GANARÍA! 』
『 Julius: … 』
Julius enmudeció ante el repentino cambio que había adoptado Subaru, quien había alzado su voz y le señalaba con su dedo.
Ante la repentina furia de Subaru, Julius abrió sus ojos de par en par y no pudo responder. Y mientras Julius se mantenía callado, Subaru comenzó a bajar su dedo y a relajar los hombros.
『 Subaru: Borra ya esa expresión de desesperación. Sé que sufres, que has sido olvidado y no tienes adónde ir… Lo siento, pero no te dejaré mostrar tu lado débil. 』
『 Julius: … 』
『 Subaru: ¿Lo has olvidado, Julius? …No, no lo olvides, Julius. 』
Subaru miraba a Julius mientras mordía sus labios con frustración.
Colocó su mano en su pecho, y una vez más hizo una declaración de las que solía hacer.
『 Subaru: Mis ojos conocen tu fuerza. Mi vergüenza lo sabe. Aunque todos lo hayan olvidado. 』
『 Julius: … 』
No podía respirar, y la sensación de sangre recorriendo su cabeza no desaparecía.
¿Cuánto hacía que no se sentía así de molesto? Quizás desde lo de Regulus. Estaba impresionado porque no había pasado ni medio día desde entonces.
¿Por cuánto tiempo había soportado su corazón y sus pulmones este tumulto en Priestella?
Y entonces…
『 Julius: Ju… jajaja. 』
『 Subaru: ¿Qué? 』
『 Julius: Jajaja… No, de verdad eres único. Me acabo de dar cuenta de ello una vez más. 』
Quitándose la cara de sorpresa que había tenido hasta entonces, Julius se dobló en carcajadas.
No pudiendo controlar las ganas de reír, Julius siguió riendo delante del disgustado Subaru. Y cuando esas ganas finalmente se disiparon, Julius dejó salir un largo suspiro.
『 Julius: Ya veo, tienes razón. Significa que no todos me han dejado atrás, ¿verdad? 』
『 Subaru: Más que dejarte atrás, yo diría que vas tres cuerpos de caballo por delante. 』
『 Julius: ¿Tres cuerpos de caballo será suficiente? 』
『 Subaru: ¡Te daré una paliza! Si Beako y yo hacemos PAIR, ¡no tendrás oportunidad! 』
Subaru enseñó el dedo corazón y escupió hacia Julius, quien parecía comenzar a volver a ser el de siempre.
Julius esquivó fácilmente el escupitajo e hizo una reverencia mientras decía 『 Ya veo 』.
『 Julius: Entonces, tendré fe en esas grandes palabras. 』
『 Subaru: ……Mmm, hazlo. Tanto como puedas, haz grandes hazañas para sorprender a todos cuando recuperen sus recuerdos. 』
Ante esa actitud engreída, Subaru esta vez levantó su pulgar… para luego poner el pulgar hacia abajo en señal de provocación. Ante ese gesto grosero, el «Más caballeroso de los caballeros» —que ahora sólo Subaru conocía— sonrió con gracia.
『 Julius: …Bien, primero de todo, y antes que a ninguna otra persona, intentaré esforzarme por sorprenderte a ti que aún me recuerdas. 』
Y dicho eso, fortaleció sus intenciones de acompañarlo a la Atalaya Pléyades que los esperaba.