La compleja mente de una doncella

Karuizawa Kei Short Story
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Traducción: Maton456Full
Primer Corrector: Robert
Segundo Corrector: Carlos

(Versión para publicación web)

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[No hemos decidido ninguna táctica, ¿está bien?]

Después de haber organizado nuestra posición para la Batalla de Caballería, Shinohara, que estaba debajo de mí, murmuró estas palabras justo antes de que comenzara la competencia.

[No creo que haya ningún problema. En un festival deportivo sólo hay que tomarlo en serio hasta cierto punto.]

[¿Eh? Ah, ok. Pero, Karuizawa-san, si crees que está bien —] 

[¿Parezco ese tipo de persona motivada?] 

[Es porque te opusiste a la propuesta de Horikita cuando la clase decidía sobre los Eventos de Participación Recomendada, así que tuve la impresión de que...]

[Ah...]

Esa no fue mi idea. Actué siguiendo las órdenes de ese tipo. Honestamente, la propuesta de Horikita de distribuir a los participantes según sus habilidades no sólo facilita las cosas, sino que también era una estrategia que aseguraba el éxito de la clase.

Incluso se podría decir que esto era cuidar de los estudiantes que no estaban dispuestos a esforzarse mucho. Parece que ese tipo me ordenó hacer cosas innecesarias, haciendo que otras personas me miraran con otros ojos.

[En resumen, hagámoslo al azar.]

[Entendido —]

Después de decir estas palabras, la Batalla de Caballería comenzó.

No debería haber nada extraordinario en la Batalla de Caballería de la escuela — estos pensamientos fueron inmediatamente despejados.
La razón de ello es que la Clase C avanzaba silenciosamente hacia delante y atacaba incesantemente a la Clase D. La vanguardia era Ibuki-san. Ella era esa existencia que arrojó a mi clase al caos.
Ibuki-san lideró a la caballería para hacer un ataque sorpresa sobre Horikita-san.

[¡Shinohara, vamos! ¡Apoya a Horikita-san!]

[¿Eh? ¡E-entendido!]

Aunque se sorprendió de que yo le diera una orden repentinamente, el caballo seguía avanzando.

[¡Aunque no estoy interesada en ganar, no quiero perder así...!]

No sabía si estas palabras se las había dicho a Shinohara o a mí misma.
En resumen, Horikita fue el objetivo y dejarla sola causaría una situación terrible.

[¡Alto! Lo siento, pero no puedo dejarlas pasar por aquí.]

La que vino a bloquearnos fue Ichinose, de la clase B. A pesar de que no he interactuado mucho con ella, sabía que sería difícil de manejar.

[¿Qué hacemos, Karuizawa-san...?]

Shinohara-san, que sostenía la posición central del caballo, me pidió que le diera instrucciones.

[No tenemos otra opción que seguir adelante, aunque realmente no quiero hacerlo.]

Mis capacidades físicas no son muy sobresalientes y no quiero hacer cosas problemáticas. Pero —

Ahora mismo ese tipo probablemente esté mirando hacia aquí. Aunque no sé por qué, pero no quiero que ese tipo me vea sufrir una derrota aplastante. Aquella existencia que sabe de la oscuridad de mi corazón. Aquella existencia que dijo que me protegerá.

Afortunadamente, los movimientos de Ichinose no son tan difíciles de manejar como pensaba. Apenas puedo lidiar con ella. Mientras la esquivaba, le di una instrucción específica a Shinohara, para que mantuviera una distancia adecuada.

[¿Por qué me esfuerzo tanto...?]

Esta vez hablaba sola. Todo el mundo se esforzaba mucho así que nadie oyó mi susurro.
Durante las vacaciones de verano, también estuve involucrada con ese tipo. Lo mismo sucedió con este festival deportivo, haciéndome ayudarle con cosas que no pude entender.

Yo sólo seguí ayudándolo, sin saber lo que estaba haciendo o lo que quería hacer. Normalmente esto sería desagradable. Pero no sé por qué nunca lo vi de esa forma.
Ciertamente eso se debe a que el daño que realmente me preocupa profundamente no apareció.
Las chicas de la clase C que querían buscar problemas conmigo no volvieron.
¿Es una mera coincidencia? No, absolutamente no. Ese tipo... Ayanokouji-kun, hizo algo por mí.
Estoy obedeciéndolo únicamente porque me dejó tener este presentimiento.

[¡¿?!] 

Apenas evadí la mano de Ichinose.

[Ah, de verdad. ¡Ésta no soy yo!]

La imagen del caballo de Horikita cayendo entró en mi campo de visión. Ah, vamos a perder.
Pero lo único que puedo hacer ahora mismo es centrarme en el adversario que tengo delante.

Poco a poco fui cambiando.
Poco a poco fui teniendo un cambio en mi corazón.
Pero lo inesperado es que no me desagrada. Ahora mismo soy incapaz de enfrentarme a los cambios graduales que me están afectando.