domingo, 24 de junio de 2018

,

Una razón para creer


Traducción:
Jair

Corrección y edición:
Robert (Primer corrector)
Carlos (Segundo corrector)
Pretinaverse (Detallitos por aquí y por allá)

※ ※ ※ ※ ※

Habiendo encontrado a Emilia, acurrucada y abrazándose las rodillas, Subaru sintió un alivio inapropiado.

Ello no sólo se debía a haber encontrado a Emilia, sino también al hecho de que Emilia estaba aquí.
Estaba convencido de que éste era el único lugar en el que podría estar, y deseaba que éste fuera el lugar en el que estuviera. Ambas cosas se cumplieron, causando la desaparición de algo opresivo en la boca del estómago de Subaru.

『 Subaru: Así que, estaba pensando, Emilia-tan. 』

『 Emilia: … 』

『 Subaru: Definitivamente puedes encerrarte en este lugar, sin que nadie pueda encontrarte. Pocas personas pueden entrar aquí y, quienes pueden, no querrían hacerlo de todas formas. 』

Aparte de Emilia, sólo otras tres personas podían entrar a la Tumba de Echidna.
Uno de ellos fue traumatizado por la Prueba y aborrecía la Tumba, otro de ellos presenció un pasado que le pertenecía a otra persona y, en consecuencia, le confió el futuro del Santuario a otro, y el último se había ganado el desagrado de la bruja a mitad de las Pruebas y se le revocaron sus calificaciones.
Todas las demás personas que tenían las calificaciones se habían apegado rigurosamente a las reglas que les habían impuesto, por lo que no entraban.
Sin duda, éste era un escondite al que sólo Emilia tenía acceso.

Emilia no dio respuesta al honesto elogio de Subaru.
Ella sólo se acurrucaba cada vez más, mirando en silencio a Subaru.

『 Subaru: ¿—Te importa si me siento a tu lado? Siendo honesto, estar de pie es bastante agotador. 』

『 Emilia: … 』

『 Subaru: De donde vengo, el silencio significa que sí. Bien, con permisito. 』

Mientras ella lo miraba fijamente, Subaru se expresó con magnificencia y tomó asiento junto a Emilia.
Una distancia de dos puños era el límite que el espíritu de hombría y coraje de Subaru podían alcanzar. Acercarse más tendría que ocurrir después de que sus palabras y comportamientos hubieran disminuido la distancia emocional entre ellos.
Dado que, en ese momento, la distancia entre sus sentimientos era mucho más grande que la medida de un puño.

『 Subaru: — 』

『 Emilia: — 』

Sentados uno junto al otro, los dos guardaban silencio.
Subaru esperaba pacientemente a que Emilia hablara. Emilia miró hacia él al mismo tiempo que él la miró, sus labios temblaban constantemente, y con un poco de duda,

『 Emilia: Subaru… 』

『 Subaru: — 』

『 Emilia: ¿Cómo es… que estás aquí? 』

『 Subaru: Bueno, esa pregunta es complicada. Es porque siempre estoy pensando en ti, Emilia-tan, así que pude deducir magistralmente que estabas aquí, supongo. 』

Realmente era todo un honor.
Ya que significaba que él era quien, al menos en el Santuario, pensaba más en Emilia y podía suponer de forma más precisa sus sentimientos.
Aunque, si de verdad estuviera en sintonía con los sentimientos de Emilia, definitivamente ahora no le estaría hablando de esta manera dentro de la Tumba.

Emilia abrió los ojos con una expresión de sorpresa mientras escuchaba la respuesta de Subaru.
Y sacudió la cabeza como si no se tratara de la respuesta que estaba buscando.

『 Emilia: No. No me refiero a eso, Subaru. No me refiero a “por qué estás aquí” … Me refiero a cómo. Se supone que sólo las personas con las calificaciones pueden entrar aquí. 』

『 Subaru: ¿Segura que no eres tú quien está olvidando algo, Emilia-tan? En nuestro primer día aquí, entré corriendo a este lugar para sacarte después de que colapsaras por completo en el interior. Aparentemente, si eres como Roswaal y la bruja te detesta mucho, es como si explotaras tan pronto entras, pero no es tan malo para mí. Se siente como si flotara, como si estuviera en un ascensor que siempre está a punto de detenerse, eso es todo. Nada que no pueda tolerar. 』

『 Emilia: …Así que es eso. 』

Dijo ella, mientras se lamentaba de haber estimado incorrectamente que este lugar era impenetrable. Miraba preocupadamente a Subaru, quien aún tenía náuseas.

『 Emilia: ¿Cómo… supiste que estaba aquí? 』

Hablar lo distraía mejor que el silencio, y le daba un poco de alivio.
Quizás habiendo notado eso mientras él hablaba, y viendo ahora a Subaru tomar grandes respiros uno tras otro, Emilia presentó una nueva pregunta.
Su solicitud estaba acompañada de sospecha y resignación, todo eso mezclado con otras emociones más complejas.
La resignación era arrogante, y la sospecha era innecesariamente paranoica. Ambas cosas eran increíblemente raras de ver en Emilia. Ésta podría ser la primera vez que Subaru las presenciaba.

『 Emilia: ¿…Subaru? 』

『 Subaru: Ah sí, perdón, perdón. Bueno, me preguntas cómo supe que estabas aquí, pues probablemente sea eso. Ese eso por el que no hay nada que no sepa sobre ti, Emilia-tan. 』

『 Emilia: Mentiroso. 』

Él no estaba intentando bromear, pero aun así su frívola declaración fue rechazada de inmediato.
Con la barbilla puesta sobre las rodillas, Emilia ladeó la cabeza mientras miraba hacia Subaru. Las emociones que se hacían evidentes a través de sus ojos amatistas marcaban el summum de la caótica confusión, siendo casi suficiente para consumirlo.

Dado que no le gustaba cómo estaba transmitiendo esas emociones, Emilia apartó su mirada de Subaru, haciendo pucheros para que Subaru no lo notara.

『 Emilia: Esa palabrería no me va a engañar. —Ni siquiera yo misma me conozco bien, es imposible que tú sí. 』

『 Subaru: Es sorprendente lo poco que ves de ti misma. Sí que hay personas que te prestan mucha atención, incluso hasta poder ver tus puntos débiles. 』

Experiencia personal — no es así como lo llamaría, pero cosas parecidas le pasaban ocasionalmente. A menudo le ocurría que, cuando él se alteraba, no podía ver lo desconsiderado, temerario e insensato que era. También ocurría que otros se lo señalaban, y sólo entonces podía reconocer eso de sí mismo.
Una vez, alguien le dijo a Subaru que era de esa manera, y empezando desde ahí —

『 Subaru: Emilia-tan, averigüé que estabas aquí mitad por creer y mitad por esperanza. 』

『 Emilia: Mitad y mitad… 』

『 Subaru: Corrí por toda la aldea, pero no pude encontrarte. Así que, en vez de pensar a dónde fuiste, puse todos mis esfuerzos en pensar porqué te fuiste. Y cuando lo hice, me di cuenta de que probablemente estarías aquí. Y, cuando te encontré, fue un enorme alivio. 』

『 Emilia: ¿…Sólo, alivio? 』

『 Subaru: ¿Hm? 』

La boca de Subaru se relajó con una sonrisa de alivio cuando Emilia hizo su pregunta.
Su voz era callada, casi al punto de desaparecer. Las cejas de Subaru se alzaron de golpe al escucharlo, y entonces Emilia lo miró fijamente, hasta lo más profundo de sus ojos.

『 Emilia: Me encontraste aquí, ¿y sólo sentiste alivio? … ¿No estabas molesto? 』

『 Subaru: Qué rayos, Emilia-tan. No me digas, ¿tenías miedo de que estuviera molesto contigo? 』

Su tímida actitud casi hizo que Subaru dejara salir una pequeña risa.
Escapar sin decirle a nadie a dónde iba, para luego ser encontrado y estar asustado de la reprimenda, era exactamente lo que un niño haría.
Aunque él podía estar de acuerdo con esa idea, ahora que sabía su edad física real y su edad mental real, ese comportamiento le parecía ajeno a ella.
Pero Subaru decidió no ponerle atención a esa extrañeza, y negó con la cabeza.

『 Subaru: No estoy molesto en absoluto. Tenía mucha prisa y, honestamente, estaba teniendo un enorme ataque de pánico, pero no molesto. Y ahora que te encontré, de hecho, estoy feliz. 』

『 Emilia: …Ya veo. 』

Las emociones que Subaru sentía por la desaparecida Emilia no eran de ira.

Suponiendo hipotéticamente que sí hubiera un poco de ira, hubiera sido por el hecho de que Emilia había hecho algo inesperado y él no puso atención a las señales, su enojo estaría dirigido a sí mismo.
Este sentimiento de prisa y pánico suyo que podía haber sido capaz incluso de arruinar todas las preparaciones que había hecho hasta ahora, había sido erradicado por el gran alivio que sintió al encontrarla.
Por lo que las preocupaciones de Emilia eran innecesarias. Eso era lo que él trataba de decir.

『 Emilia: No estás molesto. 』

Eso era lo que él trataba de decir, pero lo que acompañaba a esos murmullos no era alivio. 

『 Subaru: ¿—Emilia? 』

『 Emilia: No estás molesto conmigo. — No estarás molesto conmigo. 』

Callada, dispersa y temblorosa.
Para cuando Subaru juntó sus cejas en perplejidad, ya era demasiado tarde.
Mirando hacia abajo, mordiéndose el labio, Emilia abrió los ojos de par en par.

Las lágrimas se juntaban en sus ojos, pero Emilia trataba de evitar que fluyeran.

『 Emilia: ¿Por qué no estás molesto? 』

『 Subaru: Emili— 』

『 Emilia: Hice algo egoísta, ¿no es así? Hice algo que te angustió, ¿no es así? Me escapé sin decir nada, y te preocupé, ¿no es así? Hice que te preocuparas, preguntándote si huiría… eso fue lo que hice, ¿no es así? Y cuando alguien te hace eso, te molestas, ¿no? ¿O acaso no eres así, Subaru? 』

Interrumpiendo a Subaru, Emilia velozmente expresó palabra por palabra sus emociones.
Ella puso énfasis en el egoísmo de sus acciones, acorralando a Subaru en un intento de que condenara sus acciones.

Abrumado por su extrañeza, Subaru finalmente se dio cuenta del error decisivo que cometió al escoger las palabras.
Emilia no tenía miedo de que Subaru estuviera molesto con ella.
Emilia tenía miedo de que Subaru no criticara sus acciones.
Y eso era porque—

『 Emilia: ¿Por qué no estás molesto? ¿Acaso no estás molesto p-porque, no esperabas nada de mí? Viste cómo fallé, y aun así eres amable conmigo… ¿Es porque no estás decepcionado de mí? ¿Es porque piensas que no lo hubiera logrado? 』

『 Subaru: — 』

Éstas podrían ser las ansiedades que Emilia había estado albergando en su interior todo este tiempo, pero que había sido incapaz de expresar, la mismísima oscuridad que se revolcaba en su corazón.

Ella desafió la Prueba repetidamente, pero solo consiguió que su corazón se doblegara cada vez que entraba. Pensó que era débil y, aunque había un número de personas que mostraban su desánimo cuando fallaba, ese número incluía gente que no la culpaba, como Subaru y Puck.

Aunque las presencias de Subaru y Puck la aliviaban, también había estado luchando contra esta ansiedad tan persistente.

Las decepciones ocurrían porque había expectativas.
Ella pensó que era débil porque le enfermaba que no pudiera luchar.
Pero no importaba cuántas veces fallara consecutivamente, sería consolada con amabilidad todas las veces y, aunque eso funcionaba como un alivio temporal, le generaba un sentimiento de ansiedad incluso más grande.

Emilia siempre había temido que Subaru y Puck fueran amables con ella.

『 Subaru: No, Emilia. Eso no es lo que pienso. 』

Comprendiendo demasiado tarde la altura de la ola creciendo en el corazón de Emilia, Subaru habló. Si no capturaba a Emilia aquí y ahora, algo terrible ocurriría. Si ella seguía rechazándolo, entonces incluso si él extendiera la mano, nunca la alcanzaría otra vez.
Así que, sin siquiera detenerse a pensar en qué sería mejor decir, habló.

『 Subaru: No puedo estar molesto contigo, pero no es porque piense nada de eso… 』

『 Emilia: ¡Si eso es cierto, entonces…! ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué no mantuviste tu promesa?! 』

『 Subaru: —hk! 』

Con el rechazo de su impulsiva declaración, el nuevo tema hizo que el rostro de Subaru se endureciera.
La Promesa. Se refería a la que él y Emilia habían hecho la noche anterior, y cuestionando si había sido cumplida apropiadamente—

『 Emilia: ¡Te pedí que sostuvieras mi mano hasta el amanecer! Y lo prometiste diciendo “lo haré” … ¿Entonces por qué soltaste mi mano? ¿Por qué no cumpliste tu promesa? 』

『 Subaru: — 』

『 Emilia: Ambos, tú y Puck, rompieron… sus promesas, y se fueron. Me abandonaron, me dejaron atrás… Mentirosos. Subaru es un mentiroso. Puck es un mentiroso. …Mentirosos, mentirosos… mentirosos… 』

Con la voz cubierta de llanto, Emilia condenaba violentamente el incumplimiento de las promesas.
Mirando hacia abajo y con lágrimas desbordándose de sus ojos, Emilia golpeó la cabeza contra el hombro de Subaru, antes de agitar débilmente la mano contra su pecho. La fuerza era equivalente a nada. Pero incluso así, dolía como si hubiera sido golpeado directamente.
Éste era todo el dolor que Subaru había notado e ignorado, todo cargado por Emilia.
El cual Subaru y Puck habían puesto sobre ella.

『 Emilia: Las p-promesas son, importantes… y te lo había dicho, ¡te lo había dicho antes! Que, para los usuarios de las artes espirituales, para mí, las promesas son importantes… así que quiero que se mantengan… se suponía que te habías disculpado conmigo por haber roto una… y, aun así, rompiste, una promesa otra vez… 』

『 Subaru: …Emilia 』

『 Emilia: No rompas promesas… No digas mentiras… No debes romper promesas… Si lo haces, si lo hago, entonces, Madre y Geuse… 』

Con su rostro aún en el hombro de Subaru, las emociones de Emilia carecían de destino mientras las dejaba vagar, perdidas. Sus emociones y dolor por la traición habían convertido a sus pensamientos en pequeños y destrozados fragmentos.
Su inarticulado discurso se había hecho aún más incoherente, terminando con Emilia sollozando con la dicción de un niño lamentándose,

『 Emilia: No digas mentiras… no lo hagas… 』

Su voz temblaba con dolor y pena. Un dolor desgarrador azotaba el pecho de Subaru.
Promesa — una palabra que traía consigo diferentes connotaciones cuando la usaban Subaru y Emilia. Subaru había ignorado sus promesas una vez, hiriendo a Emilia, creando una división entre ellos. 
Después de su reunión, él comprendió verdaderamente el significado de una promesa, e hicieron una entre ellos en la forma de un vínculo.

Y, aun así, la palabra Promesa nuevamente hacía eco sin amabilidad, uniéndolos ahora con un peso abrumador.
Más que nada, el estado de Emilia cuando hablaba de Promesas difería enormemente del usual. Una parte importante de lo que conformaba a Emilia la ataba a las promesas.

『 Emilia: — 』

Con la cabeza enterrada entre las rodillas, Emilia lloraba.
Cada segundo que Subaru presenciaba esto, otro azote de culpa atacaba a su corazón.

Los sollozos hacían eco en sus oídos mientras deliberaba frenéticamente sobre qué decir.
¿Debería disculparse? ¿Debería fingir que lo entendía? ¿Debería consolarla rigurosamente? ¿Cuánta compasión era seguro mostrar?

La cabeza de Subaru daba vueltas y vueltas mientras pensaba, incapaz siquiera de ver una pista que lo llevara a la solución.
Qué haría, qué podría, qué debería, qué tendría, que sería lo mejor—

『 Subaru: — 』

Él pensaba, y pensaba, y pensaba, Subaru cerró los ojos en medio de sus enredados pensamientos, y —
Sintió que había alcanzado la respuesta.

『 Subaru: Emilia. —Te amo. 』

『 Emilia: — 』

Estas palabras en verdad no tenían nada que hacer en esta situación.

『 Emilia: ¿…Eh? 』

Escuchando las palabras de Subaru, Emilia no hizo más que un sonido de confusión mientras alzaba la mirada.
Sus llorosos ojos amatistas se abrieron por completo mientras su mirada se fijaba en Subaru. El rostro de Subaru se reflejaba distorsionado en las lágrimas de ella — y así él logró resistirse y mantener su corazón inquebrantable. 
Ya no tenía dudas sobre qué palabras debía decir.

『 Subaru: Cada maldita noche, vas y te diriges una y otra vez exactamente hacia la misma Prueba. ¿Qué demonios es esa Prueba? Es sólo el estúpido pasado. Deja de perder el tiempo quedándote atrapada en cosas que ya terminaron. 』

『 Emilia: …ah, euh, 』

『 Subaru: Y justo cuando pienso en hacerlo por ti, empiezas a decir que debes hacerlo por ti misma y te pones ridículamente tozuda al respecto. Si decir eso hace posible que puedas superarlo, entonces vale. Pero si el resultado es el mismo, entonces todo se reduce a palabrería sin valor. ¿Qué tal si te detienes un momento a considerar lo que se siente al verte fallar una y otra vez? 』

『 Emilia: S-suhbaru… 』

『 Subaru: Y para colmo, cuando tu mascota-guardián desaparece, no puedes ni ponerte de pie sola. Haces un berrinche y preocupas a todos, luego ignoras todos tus deberes y te vas a deprimirte en la cama. Bueno, pero qué malditamente adorable de tu parte, es suficiente, ya estoy harto de esto. 』

Los ojos de Emilia se abrían con incredulidad mientras Subaru escupía palabra tras palabra. Sus húmedos ojos se olvidaron de las lágrimas gracias a la impactante escena, sus temblorosos labios eran incapaces de expresar algún sonido con significado.
Sin duda, el corazón de Emilia había sido herido como nunca antes.
Enfrentándose al desdén y desagrado de Natsuki Subaru, el cual jamás había sido dirigido hacia ella, su corazón se había roto en pedazos.

El rostro de Emilia se retorció.
No era un rostro con lágrimas, tampoco era de histeria, ni tampoco mostraba el vacío de la resignación.
Impactada por las maldiciones que nunca antes se le habían dicho, el semblante de Emilia cambió. Pero no cambió a uno predecible, sino a uno completamente diferente.

— Lo que apareció en el rostro de Emilia fue una sonrisa horrorosamente forzada.

『 Emilia: Es… verdad, ¿no es así? Por supuesto, tú también pensarías así de mí, Subaru… 』

『 Subaru: — 』

『 Emilia: Todas esas son cosas que, sólo podrías llamar terribles… lo son. Desde que llegué al Santuario… no, mucho antes de eso… He causado muchos problemas, así que, yo… 』

『 Subaru: Así es. De verdad que no has hecho ni una sola cosa bien desde que llegamos al Santuario. Sé que no soy quién para hablar, pero es demasiado horrendo para ignorarlo. No hay manera de repararlo. 』

Subaru le dio la razón a Emilia respecto a su propio menosprecio.
La garganta de Emilia emitió un sonido ahogado. Un sollozo, o algo parecido, fue lo que se escuchó; su sonrisa llena de dolor aún era visible mientras hablaba.

『 Emilia: Por lo que, yo… por Puck, y por ti… f-fui, abandonada, lo cual es natural… 』

『 Subaru: Sí. Hiciste un montón de idioteces, y aún no parece haber señales de mejora. Ya que te inclinas más por el sentimiento de “por favor, deja ya que pase lo que sea” en vez de “voy a hacer algo al respecto”, sí, es completamente natural. 』

Emilia intentó responder a la desaprobación de Subaru. 
Subaru había tomado la última parte de su respuesta, con la cual la juzgó con dureza.

『 Subaru: …Pero— 』

Momentos antes de que la conversación finalizara, Subaru canceló sus negaciones.
Emilia miró a Subaru. En sus ojos había una emoción que sólo Subaru podría entender.
— Porque esa misma emoción había aparecido ya en los ojos de Subaru.

『 Subaru: —Te amo… Emilia. 』

Usando lo mismo y las mismas palabras de las que no podía escapar, Subaru le bloqueó la huida de Emilia.

※ ※ ※ ※

Las largas pestañas que enmarcan sus ojos temblaban, la declaración de Subaru impidió que Emilia pudiera pensar con claridad.

Verla pasmada, incluso con sus pensamientos detenidos en seco, hizo que Subaru sonriera débilmente.
No era alivio, y naturalmente tampoco vergüenza; más bien nostalgia. 

Sentía tanta nostalgia, que quería empezar a gritarlo todo, incluyendo lo que Emilia buscaba.

『 Subaru: Te amo. Te amo, te amo, te amo, te amo tanto que no tengo remedio. 』

『 Emilia: Qu-qué estás… así de la nada… 』

『 Subaru: Amo tu preciosísimo cabello plateado, amo tus ojos amatistas y cómo se iluminan como joyas cuando se humedecen, amo mucho tu voz y cómo me hipnotiza el sólo escucharla, y tus finas y largas piernas, y tu piel de porcelana, y nuestra diferencia de estaturas; y todo eso se acerca tanto a mi ideal, que no puedo soportarlo. Sólo estar contigo hace que mi corazón se acelere y no puedo detenerlo y oh por todos los cielos te amo. 』

『 Emilia: — 』

『 Subaru: Amo cómo eres un poco despistada, es adorable cómo pones todo tu esfuerzo en todo, hago una reverencia por lo ferviente que eres por el bien de otros, pienso que no puede pasarse por alto cómo te despreocupas de ti misma, y todas tus expresiones, y todas tus emociones; son cosas que si pudiera presenciarlas a tu lado, nada sería mejor… Y siempre estoy pensando esto. 』 

『 Emilia: ¿Por qué estás, ahora mismo…? ¡Deja de jugar conmigo! 』

Sus sentimientos por Emilia fluían a través de su boca.
Emilia intentó opacar sus palabras con un grito.

Con los hombros caídos y las cejas rígidas, Emilia veía cómo la actitud de Subaru evitaba el problema mientras estaba huyendo de las condenaciones que él mismo declaró, intentando arruinar todo lo que estuvieron hablando, y eso elevaba su furia.

『 Emilia: ¡¿Por qué estás diciendo esto de repente?! ¡Eso no era de lo que estábamos hablando! ¡E-Estabas diciendo que soy absolutamente inútil, que soy completamente incapaz, eso fue lo que dijiste! Estás harto, no puedes ni mirar… d-dijiste que soy, rayos… 』

『 Subaru: Sí, así es. Estoy sujeto a ver toda esa inutilidad y cómo los resultados siempre me hacen querer suspirar por cómo todo acabó siendo sólo palabrería insustancial. Y si además consideramos que suelo ser muy impaciente, hace mucho tiempo que habría dejado de sentir amor alguno. Así sería si no fueras tú, Emilia. 』

『 Emilia: ¡¡¿Por qué?!! 』

Aunque Subaru estaba de acuerdo con la inutilidad de sus acciones, negaba la parte más importante. Emilia elevó la voz, incapaz de estar de acuerdo, incapaz de dejar que esto pasara.

『 Emilia: Inútil e irremediable, todo eso. ¡Eso soy yo! Así que, ¿por qué estás tratando de ignorarlo? ¿Por qué estás perdonándome? ¿Por qué…? 』

『 Subaru: Si sólo tengo que responder eso, lo diré infinitamente. ¡Por-que-te-a-mo! 』

『 Emilia: —hk 』

Emilia sollozaba mientras se acercaba, Subaru de la misma manera acercaba su rostro poco a poco mientras gritaba. 
Emilia retrocedió, abrumada, pero por cada retroceso suyo, Subaru se acercaba exactamente esa distancia. No hubo cambio alguno en el hecho de que estaban tan cerca que se respiraban en la cara mientras se miraban.

『 Subaru: Te amo. Así que no importa qué cosas desafortunadas vea en ti, se siente como si descubriera un lado diferente tuyo, e incluso cuando eres incapaz de algo, acabo ayudándote pensando que se trata de una barrera que debes superar, y no importa cuán harta estés de ti, yo nunca te odiaré. 』

『 Emilia: — 』

『 Subaru: Incluso si odias lo débil y patética que eres, y acabes pensando que también otros deben juzgarte negativamente… Seguiré esperando cosas de ti. Nunca usaré tu debilidad como una razón para alejarme o abandonarte. 』

Los ojos de Emilia vacilaban.
Su mirada estaba fija en Subaru — sus ojos estaban llenos de aceptación por su menosprecio hacia ella. Receptividad contra resignación. Y su débil deseo de ahogarse en una piscina de dolor y pena.
Emilia quería que la reprocharan. A menudo ocurre que, al hacer que la mayoría de la gente acepte que no tienes remedio, cuando te das cuenta de que nadie puede ayudarte entonces empiezas a sentir una especie de alivio.

Subaru conocía ese sentimiento, pero también sabía lo que era ser sacado de ahí.
Porque Natsuki Subaru había intentado abandonarse a sí mismo una vez, pero había sido incapaz de hacer que los demás lo abandonaran.

『 Subaru: Estoy loco por ti. Todo lo bueno en ti brilla con fuerza frente a mí. Y claro que sé que no todo en ti es bueno. No eres… no eres ningún ángel, ni una diosa, eres una chica ordinaria. El dolor y el sufrimiento te hacen querer llorar, quieres evitar y alejarte de todo aquello que no te guste, y tienes el deseo de elegir sólo las opciones fáciles y divertidas cuando estén disponibles. 』

『 Emilia: — 』

『 Subaru: Pero aun incluyendo esas partes débiles, o hasta podría llamarlas partes desagradables, amo completamente la persona que eres, Emilia. Así que… incluso ahora, no estoy decepcionado de ti en lo más mínimo. 』

『 Emilia: —hk! ¡¿No crees…?! ¡¿…Q-que eso es ser demasiado egoísta?! 』

La boca de Subaru divulgaba la forma de sus sentimientos.
Escuchándolos en secuencia, Emilia fallaba en suprimir su confusión mientras trataba de refutarlo.

『 Emilia: Me reprochaste, dijiste muchas veces que soy una inútil, ¿y aun así dices que me amas? …¡Q-quién se lo va a creer! Subaru, cómo puedes creer en mí de esa manera, eso no… ¡No puedo entenderlo! 』

『 Subaru: ¡No! No, ¡estás muy equivocada! No es que te ame porque crea en ti, sino que te amo y por eso creo en ti. ¡Es totalmente al revés! 』

『 Emilia: ¡El amor no es razón suficiente para creer! 』

『 Subaru: ¡—! ¡Si el amor no fuera razón suficiente para creer, entonces quién demonios pasaría por todo este sufrimiento voluntariamente para ayudar a una mujer que es un dolor en el trasero como tú! 』

Las voces se alzaban, dos emociones chocaban.
Subaru se apoyó en el muro para poder levantarse, Emilia hizo lo mismo para seguir encarándolo.

Estaban tan cerca que sus frentes podrían chocar. Con sus cejas totalmente rígidas, Subaru y Emilia gritaban sus sentimientos. La saliva volaba, sus rostros estaban enrojecidos, gritando lo equivocado que estaba el otro, ellos nunca antes habían alzado la voz contra el otro de esa manera.

Fanart por HaruSabin.

『 Subaru: ¡Te amo! Te amo tanto que me vuelves loco, tanto que no me molestaría morir. Es por eso que puedo enfrentarme al dolor y al sufrimiento, ¡incluso ahora estoy al borde de vomitar, pero aquí estoy, hablando contigo! 』

『 Emilia: ¡Yo no! ¡No pedí nada de eso! Yendo por ahí diciendo todas las cosas egoístas que te plazcan… ¡Eres tú quien nunca piensa en mis sentimientos, Subaru! Justo como ahora… todo es mi culpa y tú tienes que lidiar con ello, y siempre acabas saliendo herido… ¡No tienes idea de cómo me siento al respecto! 』

『 Subaru: ¡Como si pudiera saberlo, y ni siquiera voy a intentar pensarlo! ¡Sólo pienso en cómo verme genial cuando estoy cerca de ti! Pienso en qué podría hacerme ver mejor ante tus ojos, y en qué te haría más feliz… la gente está poniendo todo su maldito esfuerzo para lograrlo, ¡qué tal si sigues el plan y pones una cara bonita de vez en cuando! 』

『 Emilia: ¡No hables de mí como si fuera una muñeca! Si quisieras que fuera feliz, si quisieras eso para mí… E-entonces, ¡¿por qué rompiste tu promesa?! ¡Sólo tenías que quedarte conmigo como te pedí! ¡¿Cómo es que no pudiste hacer eso por mí?! ¡Apuesto a que en realidad me odias! 』

『 Subaru: ¡¡Te amo!! 』

『 Emilia: ¡¡Mientes!! 』

Subaru gritaba todos sus sentimientos desesperadamente, sólo para que Emilia le devolviera los gritos. ¿Cuán grande fue el rodeo que tuvo que tomar con tal de expresar estos sentimientos? ¿Cuán grande fue el obstáculo que Subaru tuvo que superar con tal de decir lo que tenía que ser dicho?
Todas estas confesiones de amor, lanzadas tantas veces que ya prácticamente lucían baratas, contenían los sentimientos más honestos de Subaru, expresados desde el fondo de su ser, poniendo una porción de su alma en cada una de ellas.

『 Subaru: ¡No estoy mintiendo! ¡Te amo! ¡Qué tal si me dices lo que piensas de mí! ¡Siempre andas con esa actitud con la que haces esas estúpidas insinuaciones! ¡¿Tienes alguna maldita idea de la sacudida que siento en mi corazón cada vez que haces esas expresiones tan tiernas que me hacen pensar que tengo esperanza?! ¡Deja de jugar conmigo! 』

『 Emilia: ¡No estoy jugando contigo! ¡Sólo estoy siendo normal, deja de decir cosas extrañas! Tengo tantas cosas en que pensar ahora mismo y me estoy enfrentando a un problema serio, y me pides que te diga qué siento por ti… ¡No puedo pensar en eso! ¡Detente! ¡No me fastidies! 』

『 Subaru: ¡Quién fastidia a quién aquí! ¡Tú! ¡Tú me estás fastidiando! 』

『 Emilia: ¡No! ¡Tú me estás fastidiando a mí! 』

No había ni la más pequeña pizca de un debate racional, tan solo se trataba de un enfrentamiento de emociones.
Como dos niños haciendo un berrinche, gritándose insultos el uno al otro, Subaru y Emilia afirmaban sus sentimientos.

Sus voces hacían eco por toda la mal iluminada y estrecha Tumba, todo ese alboroto subiendo de tono dentro de aquella estructura hacía que resonara por todo el lugar. La intensidad de su discusión podía prácticamente despertar a la dueña de la Tumba, los dos respiraban agitadamente mientras seguían con su pleito infructífero.

『 Emilia: ¡Ya no puedo confiar en nada de lo que digas! ¡Eres un mentiroso! Rompiste tu promesa, e incluso así vienes como si nada hubiera pasado… ¡P-pensaste que no lo notaría, ¿no es así?! ¡Pero lo vi! ¡Quería ver si cumplirías tu promesa conmigo! 』

『 Subaru: ¡Deja de ser tan idiota! ¡¿No te da vergüenza hacer esas tonterías, fingiendo ser débil para probar a la gente?! 』

『 Emilia: ¡No necesito escuchar nada de un mentiroso rompe-promesas! 』

『 Subaru: ¡Que haya roto la promesa no tiene nada que ver con esto! 』

Las mejillas de Emilia se enrojecían de furia mientras Subaru intentaba evadir el problema. Ella no podía dispersar su enojo por completo, la emoción era tan intensa que no podía hablar.
Emilia respiró agitadamente varias veces antes de sacar las palabras por la boca.

『 Emilia: ¿Por qué… por qué rompiste tu promesa? 』

『 Subaru: …Me siento mal por haber roto la promesa. De verdad me hubiera gustado sostener tu mano hasta el amanecer. 』

『 Emilia: Eso no es lo que pregunté. —¿Por qué rompiste tu promesa? 』

『 Subaru: …No puedo decirlo. 』

Rechinando los dientes, Subaru respondió a la pregunta de Emilia angustiosamente.
Al ver que él seguía evitando dar una respuesta, Emilia dejó salir un profundo suspiro.

『 Emilia: No mantienes tus promesas. Tampoco me dices porqué las rompiste… ¿Cómo esperas que lidie con eso? Si vas a decirme que me amas… ¡entonces actúa como si lo hicieras! Si no lo haces, no… puedo, creerte… 』

『 Subaru: Emilia. 』

『 Emilia: ¡Si hubieras cumplido tu promesa y te hubieras quedado conmigo hasta el amanecer! ¡Entonces sabría que puedo creer en ti! ¡Creería en ti, y te lo confiaría todo! Pero rompiste tu promesa… así que, ya es suficiente para mí… Los dos, tú y Puck, me abandonaron… 』

Con un rostro impasible, Emilia hundió sus dedos en su cabello plateado, y miró hacia abajo.
Su fervor cambió de forma y dirección, mientras se sostenía a sí misma.

『 Emilia: Ahora que Puck se fue, estas escenas han estado apareciendo en mi cabeza… Están en mi cabeza, escenas que no conozco, conversaciones que no recuerdo, siguen fluyendo y fluyendo… 』

『 Subaru: — 』

『 Emilia: Pensaba que lo recordaba todo, pero no sé nada sobre estos recuerdos… Aun así, realmente son mis recuerdos… y cada vez que los recuerdo, cuando algo que se supone que debía estar ahí pero olvidé regresa, me da ansiedad… 』

Estos recuerdos a los que se refería Emilia eran sus verdaderos recuerdos, los cuales ella hubiera deseado ignorar. Emilia había usado a Puck para sellar un pasado que ella no quería recordar. Su contrato con Puck había terminado, y sin su vínculo, los recuerdos comenzaron a desbordarse, sofocando al interior de Emilia con sus auténticos recuerdos.

Pero, para ella, esto era tan dramático, que significaba una alteración de todo su ser.

『 Emilia: Finalmente me di cuenta de que me estaba apoyando en Puck, y estaba huyendo de muchas cosas… tengo la certeza de que Puck se fue para dejarme claro eso. Pero estoy asustada. Tengo miedo. Puck ya no está, y mis verdaderos recuerdos están volviendo… Es como si estuviera dejando de ser yo. 』

『 Subaru: — 』

『 Emilia: Cuando todos los recuerdos vuelvan… Sé que ya no seré la misma. Mi yo de ahora cree que empezó en un lugar con recuerdos que difieren de la realidad… pero, cuando recuerde el verdadero lugar donde comencé… sé que la yo que ha llegado hasta aquí desaparecerá… 』

La decisión y determinación de Emilia se habían formado basándose en recuerdos falsos. Por lo tanto, cuando recupere sus verdaderos recuerdos, ¿qué ocurriría con la actual decisión y determinación de Emilia, así como con el sendero que había recorrido hasta ahora?

« Naoko: —Lo más importante, no es el principio o la mitad, es el final. » 

『 Subaru: — 』

Una voz pasó por la mente de Subaru.
Esta distante y familiar voz pertenecía a alguien cercano a Subaru, alguien que nunca más volvería a ver.
Al final del fin de su despedida, estas palabras le fueron entregadas como tarea.

Sí. Tienes razón, pensó.

No importaba cómo empezaran las cosas ni cuál camino eligieran. Mientras no se alcanzara el fin del final del fin, ¿quién tenía el derecho a decir que había sido un error?

『 Subaru: No importa lo que recuerdes, nada cambiará. Te amo. Siempre te amaré. 』

『 Emilia: —hk. No puedo, creerte. Esta yo que dices amar… d-desaparecerá. Incluso si ya no está, ¿aun así, seguirás, diciéndolo…? 』

『 Subaru: Sí. No importa lo que pase, tú no desaparecerás. Te amo. 』

『 Emilia: …Eres un mentiroso. N-no puedes, lograr que… te crea… 』

『 Subaru: —Bien, entonces haré que me creas. 』

Con voz trémula y ojos vacilantes, Emilia intentaba rechazar a Subaru.
Las palabras de Subaru no llegaban a ella. Su actitud tampoco la convencería. En ese caso, la única forma de transmitirle sus sentimientos era a través de la acción.
Así que,

『 Emilia: Suhbar… 』

『 Subaru: Si no lo quieres, sólo esquívalo. 』

Estaban dentro del alcance de sus respiraciones — o no, ni siquiera sus respiraciones podían intervenir en el espacio que había entre ellos. Subaru tomó a Emilia por los hombros, y acercó su rostro. Mientras observaba a Subaru aproximarse, la confusión crecía en los ojos de Emilia y su cuerpo se puso rígido.

Por un instante, él esperó.
Si iba a alejarlo, éste era el momento.

『 Emilia: — 』

Pero Emilia sólo cerró los ojos.
Subaru no sabía si era el resultado de la resignación o la duda.

『 Subaru: —Mmh 』

『 Emilia: —Ngh 』

Sus respiraciones se entremezclaban, Emilia aguantó la respiración, Subaru sentía dolor. El choque de sus dientes producía ligeros sonidos. Todo comenzó con ese leve e ínfimo dolor, pero inmediatamente desapareció de su mente al estar frente a la intensidad de este calor.

Labios suaves. Un breve contacto, un beso.

  
Este era el primer beso para Emilia, y para Subaru era la segunda vez que la besaba.
No era como la primera vez, con un frío sabor a muerte.
Su segundo beso, cálido, sabía a vida.

『 Emilia: ......Ah. 』

En un movimiento simultáneo, sus labios se separaron.

Ambos alejaron su rostro del otro, olvidando respirar mientras se miraban.
Mejillas ruborizadas. Ojos húmedos. Su reflejo en los ojos de Emilia le mostraba que se encontraba totalmente hechizado. Su patético semblante llevó a Subaru a recobrar los sentidos primero, recordando cómo respirar.

『 Subaru: Te amo. 』

『 Emilia: — 』

『 Subaru: No importan las cosas malas que vea en ti, no importan las discusiones que tengamos, seguiré amándote inalterablemente. Eso nunca cambiará, no importa lo que pase — y por eso siempre creeré en ti. Y si me preguntas por qué—. 』

『 Emilia: Es porque, me amas… 』

Terminando la frase de Subaru, Emilia se tocó los labios en asombro. Pasó sus dedos sobre ellos, como si tratara de aferrarse a los vestigios de aquel contacto, sus ojos se desbordaban de agua. Una lágrima descendía por sus blancas mejillas, resplandeciendo como una lágrima de la mismísima luna.

『 Subaru: Es normal que sientas ansiedad si aparecen recuerdos desconocidos. Y entiendo que te asuste que una tú desconocida vaya a aparecer. Pero eso no significa que el camino que has recorrido se desvanecerá, o que tus sentimientos vayan a cambiar. 』

『 Emilia: ¿Cómo puedes… decir todo eso? 』

『 Subaru: Lo más importante no es el principio. Es el final. — Me lo dijo la mujer que más respeto en el mundo. 』

Su madre era la peor en el mundo dando consejos, aun así, de alguna manera, logró enseñarle lo más importante del mundo.
Él no pensaba que lo entendía por completo, pero deseaba entenderlo con el tiempo.
Porque había una chica justo frente a él, con la que deseaba entenderlo.

Mientras Emilia aún estaba inmóvil por la ansiedad, Subaru se encogió de hombros relajadamente para demostrarle a ella que no era problema alguno, y así eliminar sus preocupaciones.

『 Subaru: Está bien, Emilia. No importa lo que recuerdes, estaré de tu lado. Todo estará bien, sin importar qué cosas olvidadas recuerdes. Pero si aun así estás asustada, entonces vamos a encontrarlo. 』

『 Emilia: ¿Encontrarlo?… ¿Encontrar qué? 』

『 Subaru: Así como yo puedo seguir adelante gracias a mi amor por ti, tú también debes encontrar ese precioso sentimiento que te permita seguir adelante pase lo que pase. 』

Emilia nunca había dudado en ofrecerse voluntaria por el bien de otros.
Sin embargo, Subaru pensaba que su actitud de priorizar a otros antes que a ella era algo noble, hermoso, y lo adoraba.

Las palabras “por el bien de otros” eran terriblemente gentiles, y terriblemente tristes.
Porque los sentimientos por alguien que nunca has visto sin duda alguna no podrían rivalizar con los sentimientos que se tenían por alguien presente.

『 Subaru: Aunque me gustaría que ese precioso sentimiento fuera dirigido hacia mí. 』

『 Emilia: Un… precioso sentimiento… mío… 』

Quizás Emilia no estaba escuchando a Subaru, ya que puso su mano sobre su pecho mientras bajaba la mirada.
Sus dedos se encontraban donde solía estar la joya de Puck.
Con su vínculo roto, no había nada que tocar. La punta de sus dedos sólo alcanzaba la nada. Pero Emilia sostuvo su mano firmemente.

『 Emilia: Cuando haya recuperado todos estos recuerdos… Tal vez ahí estará, ese precioso sentimiento. 』

『 Subaru: Sí. Ahí se encuentra. Una razón para seguir caminando. 』

『 Emilia: —Mn. 』

Su semblante no era de duda, pero tampoco era de perfecta aceptación.
Después de ver a Emilia asentir ligeramente, Subaru cerró los ojos mientras orientaba el rostro hacia el techo.

Tuvo la sensación de que las palabras que lo habían inspirado hacía tiempo habían sido más poderosas.
Tuvo la sensación de que habían sido palabras más gentiles, más estrictas y más fuertes las que lo salvaron.

¿Habría logrado él ser la fuerza de Emilia?

『 Subaru: — 』

Hacerle esa pregunta sería extremadamente patético.
Él suspiró y, en cuanto se relajó, el malestar que había olvidado lo sacudió otra vez. Impulsivamente, apoyó la mano en el muro, apenas logrando evitar vomitar.

『 Emilia: ¿Subaru? 』

『 Subaru: No es nada… o eso me gustaría decir, pero sí es algo. Ahora mismo, estoy bastante mal. Como sea, si vamos a seguir discutiendo o peleando, ¿podemos hacerlo afuera? 』

『 Emilia: Cielos… Pero no quiero hacer ninguna de esas dos cosas. 』

Los labios de Emilia formaron una débil sonrisa.
Pero esa débil expresión aún mostraba fuertemente la apariencia de su habitual farsa frenética. Ella aún no había alcanzado una respuesta clara. Su ansiedad aún no había sido dispersada por completo.

Con la mano apoyada en el muro, Subaru empezó a caminar hacia la salida de la Tumba.
Los pasos de Subaru eran inestables, mientras la mano de Emilia se movía hacia delante y hacia atrás, indecisa de si debería tocar la espalda de Subaru. Parecía que el contacto previo de sus labios la había afectado considerablemente.
Viéndolo en retrospectiva ahora, eso fue algo muy atrevido de su parte. Su rostro se enrojeció.

Pero todos estos sentimientos debían dejarse para otro momento.

『 Subaru: — 』

La mejor forma de mostrarle a Emilia que era su aliado y que actuaba por su bien.
El acto de cumplir el rol que él mismo se había asignado, para protegerla, y proteger sus sentimientos por ella.
Y por eso—

『 Subaru: Debo terminar lo que empecé. 』

Cuando salieron de la Tumba, la brillante luz del sol les dio la bienvenida mientras abandonaban la oscuridad.
Y entonces,

『 Subaru: —Ey, te hice esperar. 』

『 ???: Tch. 』

Allí, chasqueando la lengua irritadamente mientras Subaru le saludaba—

『 ???: —Para nada, no ‘staba esperando. 』

— a Garfiel, con su cuerpo bañado en sangre y un aura de hostilidad.